La Fiscalía General del Estado de Durango confirmó la detención de Paloma "N" y Víctor "N", madre y padrastro, de Paloma Nicole, la menor de 14 años que murió tras someterse a una cirugía estética el 12 de septiembre en una clínica privada.
La operación estuvo a cargo de su padrastro, el cirujano plástico Víctor Manuel Rosales Galindo, pareja de la madre de la menor. Días después, Paloma entró en coma y el 20 de septiembre fue declarada muerta.
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De acuerdo con el Registro Nacional de Detenciones, Paloma "N" y Víctor "N", fueron detenidos este sábado a las 12:35 horas y puestos a disposición del juez primero del Centro de Justicia de Niñas, Niños y Adolescentes del Primer Distrito Judicial del DIF Estatal de Durango.
Contexto: Cabe recordar que fue el padre de la menor, Carlos Saíd Arellano, quien levantó la voz. Él asegura que nunca dio autorización para la cirugía y que, cuando vio a su hija en el hospital, ya estaba intubada y en estado crítico. La sorpresa mayor llegó en el funeral: el cuerpo de Paloma mostraba cicatrices, implantes y un corpiño quirúrgico, lo que confirmaba que la versión de una complicación por COVID era falsa.
La familia paterna denunció que la muerte fue ocultada con irregularidades: el certificado de defunción se expidió de forma apresurada y no se practicó la necropsia de ley. Solo hasta que el papá revisó el cuerpo y reunió pruebas, acudió a la Fiscalía de Durango para exigir justicia.
¿Cómo fue el plan?
De acuerdo con Infobae, el el supuesto plan habrìa comenzado días previos al 11 de septiembre, cuando la menor, presuntamente influenciada por los dos adultos ahora detenidos, manifestó en la secundaria donde estudiaba en Durango que se sentía mal, por lo que se le permitió la salida del plantel para un supuesto chequeo médico.
Tras una supuesta revisión médica en la Clínica Santa María de Durango, la madre de Paloma Nicole informó a su exesposo que la menor padecía covid-19 y por ello se marcharían desde el 11 de septiembre a la sierra del estado. Todo esto con la intención de “aislarse” por la enfermedad, lo que implicaría estar incomunicados por la poca señal de la zona.
Sin embargo, todo habría sido un plan para engañar a Carlos Saíd Arellano, quien al asistir a la Clínica Santa María de Durango el 15 de septiembre, descubrió que su hija estaba en coma e intubada por un paro cardiorrespiratorio, provocado supuestamente por el covid-19. Posteriormente, se confirmó que la verdadera razón de la muerte de Paloma Nicole fueron complicaciones de la operación estética.
Nuevos detalles del caso
Uno de los nuevos detalles que indignó al país es que Paloma Yazmín Escobedo Quiñónez, la madre de la menor, habría ingresado al quirófano junto al cirujano. Según el testimonio del padre en entrevista con el influencer Mr. Dr, ella se hacía pasar por enfermera, aunque en los registros profesionales no aparece ninguna cédula a su nombre.
Paloma Escobedo, quien ha sido paciente frecuente de cirugías estéticas, habría promovido en su hija el mismo gusto. Incluso, hoy se sabe que el regalo de 15 años para la adolescente eran tres procedimientos; implantes mamarios, liposucción y lipotransferencia a glúteos.
Las revelaciones posteriores muestran un escenario aún más grave. La joven fue operada a pesar de estar enferma de COVID, condición que según especialistas, aumentaba los riesgos anestésicos y complicaciones respiratorias. Con 14 años, sin autorización paterna y en un estado de salud comprometido, Paloma Nicole entró al quirófano sin que se cumpliera con los protocolos médicos básicos.
El cirujano Víctor Manuel Rosales Galindo sí cuenta con cédulas profesionales y especialidades en regla, pero su decisión de intervenir a la menor sin aval del padre abrió un debate en redes sociales sobre la ética y responsabilidad en la práctica médica.
Influencias, temor de impunidad y reacción del Gobierno
La familia paterna teme que el caso quede sin castigo, pues el padre del cirujano es Víctor Manuel Rosales Leyva, magistrado en Durango, lo que ha levantado sospechas sobre un posible tráfico de influencias. “No queremos que esto se quede en silencio, mi hija merece justicia”, declaró Carlos Saíd.
En medio de estas denuncias, tanto Rosales Galindo como Paloma Escobedo cerraron sus redes sociales y se desconoce el paradero del médico, lo que incrementa la presión sobre las autoridades estatales.
El caso llegó hasta la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quien en conferencia mañanera confirmó que solicitará información sobre las irregularidades médicas y judiciales en torno a la muerte de la adolescente. “Buscamos a la familia y vemos cómo podemos apoyar”, dijo al anunciar que se dará seguimiento puntual a la investigación.
Contexto: Mientras tanto, la Fiscalía de Durango mantiene abierta la carpeta para determinar responsabilidades del cirujano, del hospital y de la madre de la menor. Lo único claro, por ahora, es que Paloma Nicole nunca debió haber entrado al quirófano y que su muerte se convirtió en un caso que ha sacudido a todo México.
No habrá impunidad: gobernador
El gobernador de Durango, Esteban Alejandro Villegas Villarreal, afirmó que en el caso de la muerte de Paloma Nicole, la adolescente de 14 años sometida a una cirugía estética, “no habrá impunidad”.
Señaló que hasta ahora no existe una orden de aprehensión contra la madre de la menor ni contra su pareja, el cirujano Víctor Manuel Rosales Galindo, pero aseguró que se mantiene a la espera de los avances de la investigación que lleva la Fiscalía estatal para que se actúe conforme a la ley.
Villegas Villarreal subrayó que aunque el médico cirujano Víctor Manuel Rosales Galindo es hijo del magistrado Víctor Manuel Rosales Leyva, esta circunstancia no influirá en el proceso ni será un obstáculo para que se haga justicia. “En Durango nadie está por encima de la ley y este caso no será la excepción”, puntualizó el mandatario.