Monterrey.- Los ganaderos de Nuevo León manifestaron su preocupación por la detección del gusano barrenador en la entidad y solicitaron a los gobiernos estatal y federal destinar recursos sanitarios para enfrentar el problema y blindar al sector pecuario.
Noel Ramírez, presidente de la Unión Ganadera Regional de Nuevo León, explicó que el contagio pudo haberse originado en Veracruz durante el embarque de una vaca de ocho meses. “El contagio se dio a raíz de la movilización y la larva pudo haberse instalado en el animal durante el embarque en Veracruz. Estamos mortificados de que este tipo de situaciones sean cada vez más frecuentes”, señaló.
Riesgo para la exportación de ganado
El líder ganadero pidió reforzar la vigilancia en las casetas de acceso, con revisiones más estrictas que incluyan la verificación directa de los animales. Subrayó que esta situación retrasa la recuperación del estatus sanitario que permitiría a Nuevo León exportar ganado a Estados Unidos.
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Cabe recordar que el estado perdió en 2023 el Certificado de Estatus Sanitario para exportar reses al vecino país, lo que requiere de un censo de ganado inspeccionado y vacunado contra la tuberculosis. Este proceso implica una inversión de 80 millones de pesos, de los cuales apenas se ha cubierto un 48 por ciento.
Gusano barrenador complica panorama
Ramírez advirtió que, con la presencia del gusano barrenador, el panorama se complica aún más, pues se necesitan recursos adicionales y acciones inmediatas. Las pláticas sobre el tema se mantienen con Marco González, secretario de Desarrollo Regional y Agropecuario estatal.
La plaga fue detectada en el municipio de Sabinas Hidalgo, a unos 100 kilómetros al norte de Monterrey y a 117 de la frontera con Texas, lo que enciende las alarmas por la cercanía con Estados Unidos.
¿Qué dicen los productores?
Ante la detección de gusano barrenador en Nuevo León, los productores de carne agrupados en la Asociación Mexicana de Productores de Carne reiteraron que la única herramienta efectiva para romper el ciclo de esta plaga es la liberación intensiva de moscas estériles.
"La solución no es implementar más restricciones al ganado, pues el parásito afecta a cualquier animal de sangre caliente. Mientras no se intensifique la estrategia biológica, el riesgo de propagación seguirá latente", dijo.
Reiteraron que los grandes esfuerzos que se han hecho en materia de movilización de ganado han servido para monitorear y, en algunos casos, mitigar parcialmente el avance de la plaga. Sin embargo, está demostrado que no son suficientes para erradicarla.
Dio como referencia que desde que se registró la presencia del gusano barrenador en México en 2024, se han activado medidas de control biológico. El hallazgo de casos en nuevas zonas como el caso de Nuevo León, el cual fue reportado por una engorda a SENASICA y esta con la autoridad de USDA, de acuerdo con el protocolo establecido; es muestra de que los protocolos de monitoreo están funcionando y detectando oportunamente la presencia del parásito.
Contexto: La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Agricultura) informó que el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), dijo que interceptó en Nuevo León el caso de gusano barrenador del ganado (GBG) y que el animal afectado fue atendido de inmediato para evitar la propagación y minimizar el riesgo de un brote en la entidad.
El hallazgo fue confirmado el pasado 21 de septiembre, tras lo cual el titular de Agricultura, Julio Berdegué, se comunicó con la secretaria del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, para compartir detalles del caso y de las acciones implementadas. Estas medidas forman parte del Plan de Acción Conjunta suscrito por México y Estados Unidos el 15 de agosto pasado.
Senasica precisó que la detección ocurrió en fase temprana, lo que descartó la posibilidad de aparición de moscas y redujo al mínimo el riesgo de dispersión en la zona libre. El cargamento provenía de Minatitlán, Veracruz, e incluía 100 animales; solo uno resultó infectado con miasis, fue curado, y el resto del ganado recibió tratamiento preventivo con ivermectina.