Ciudad Juárez, Chihuahua- Cuatro trabajadoras de una fábrica de textiles en Ciudad Juárez, Chihuahua, fueron despedidas luego de que grabaran y difundieran en TikTok una serie de videos durante su jornada laboral, violando así las normas internas y un acuerdo de privacidad firmado con la empresa.
Las jóvenes, que buscaban ganar seguidores mostrando su amistad y vida cotidiana, comenzaron a grabar contenidos dentro de las instalaciones de la fábrica, incluyendo bailes y recreaciones de escenas de televisión. Según sus propias publicaciones, la intención era generar risas y mostrar su camaradería mientras trabajaban.
Te podría interesar
Aunque los hechos ocurrieron en junio pasado, los videos comenzaron a viralizarse en las últimas horas, alcanzando miles de reproducciones y comentarios en redes sociales. Esto provocó que el caso llegara a la opinión pública y generara debate sobre el uso de redes sociales en el ámbito laboral.
En los clips se observa a las trabajadoras en áreas de la planta, en ocasiones durante pausas y descansos, pero siempre dentro del horario laboral y en espacios donde se desarrollan actividades productivas. La difusión de este material, según la empresa, contravino las políticas internas de seguridad y confidencialidad.
Directivos de la fábrica señalaron que, al detectar que las grabaciones se realizaron en zonas restringidas y sin autorización, optaron por terminar la relación laboral con las cuatro empleadas, argumentando que el contrato firmado al inicio de su empleo incluía cláusulas de privacidad que estaban obligadas a respetar.
Especialistas en derecho laboral explicaron que, aunque en México no existe una ley que prohíba expresamente grabar videos en el trabajo para redes sociales, los empleadores pueden sancionar o despedir a quienes vulneren acuerdos de confidencialidad, revelen información interna o interrumpan la operación de la empresa.
De acuerdo con los especialistas en derecho laboral, cualquier grabación que ponga en riesgo la seguridad de la planta, muestre procesos industriales protegidos o afecte la imagen de la empresa, puede considerarse una falta grave, incluso si se realiza durante descansos autorizados.
Además, se advirtió que este tipo de publicaciones podrían derivar en sanciones más severas si involucran burlas hacia la empresa, contenido ofensivo o si exhiben a compañeros de trabajo sin su consentimiento, lo que podría dar lugar a demandas por daño moral.
El caso ha generado opiniones divididas en redes sociales. Mientras algunos usuarios critican la decisión de la empresa y defienden a las jóvenes, otros consideran que las trabajadoras deben asumir la responsabilidad de haber incumplido un acuerdo contractual.
El episodio también reabre el debate sobre la necesidad de que los empleados conozcan con claridad las políticas internas de su lugar de trabajo y sobre cómo equilibrar la vida laboral con la participación en redes sociales, en un contexto donde plataformas como TikTok son parte de la vida diaria de millones de personas.
Contexto: Este caso es relevante porque refleja el impacto que el uso de redes sociales, especialmente TikTok, puede tener en el ámbito laboral, y cómo la falta de conocimiento o el incumplimiento de cláusulas de privacidad, puede derivar en consecuencias serias como el despido. Además, subraya la necesidad de que tanto empleados como empleadores definan y comprendan las reglas sobre el uso de dispositivos y la grabación de contenido en espacios de trabajo para evitar conflictos legales y proteger la seguridad e imagen de las empresas.
