Nueve personas más fueron detenidas este sábado en Aguascalientes, tras los narcobloqueos y ataques a negocios registrados luego de un operativo militar y policial en la comunidad de Pabellón de Hidalgo, en el municipio de Rincón de Romos.
Con estas detenciones, suman ya 27 personas capturadas en relación con los hechos violentos, informó este domingo 27 de julio el fiscal general del estado, Manuel Alonso García.
La violencia se desató tras el desmantelamiento de un campamento clandestino presuntamente utilizado por un grupo delictivo. Durante el operativo, se aseguraron armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, cartuchos útiles, vehículos con reporte de robo y otros objetos presuntamente vinculados a actividades ilícitas. Ahí fueron capturadas 18 personas.
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Horas más tarde, se registraron bloqueos con vehículos incendiados en distintos puntos de la entidad, además de ataques a comercios.
“Las nueve personas detenidas este sábado están relacionadas con los bloqueos y daños registrados, y fueron aseguradas gracias a la rápida respuesta de las corporaciones de seguridad en zonas urbanas y rurales”, detalló el fiscal.
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Como respuesta a la escalada de violencia, las autoridades implementaron el operativo Blindaje Aguascalientes para reforzar la seguridad en todo el estado.
Los 27 detenidos fueron puestos a disposición del Ministerio Público del fuero común y federal, que ya integran las carpetas correspondientes para deslindar responsabilidades y judicializar los casos.
Operativo desata narcobloqueos
Aguascalientes vivió una jornada de violencia este sábado 26 de julio, marcada por una serie de incidentes que, según las autoridades, fueron una respuesta del crimen organizado a un importante operativo de seguridad. Los hechos incluyeron bloqueos carreteros, quema de vehículos y ataques a tiendas de conveniencia con bombas molotov.
La Secretaría de Seguridad Pública de Aguascalientes informó que la violencia se desató tras un operativo coordinado entre los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal). Este despliegue se llevó a cabo en la zona serrana de la comunidad de Pabellón de Hidalgo, en el municipio de Rincón de Romos.
El objetivo del operativo fue desmantelar un campamento clandestino, presuntamente utilizado para actividades delictivas o la producción de drogas sintéticas. La intervención, resultado de labores de inteligencia, contó con la participación activa de elementos del Ejército Mexicano, Guardia Nacional, Policía Estatal y Policía Municipal y el apoyo aéreo de los helicópteros Fuerza Uno y Halcón Uno.
Durante el operativo, se logró la detención de 18 personas. Además de las detenciones, las autoridades aseguraron equipo táctico, armas de fuego y vehículos. Entre lo incautado se mencionan al menos 19 armas de fuego (incluyendo algunas de alto calibre) y un aditamento lanzagranadas, así como 28 chalecos tácticos.
Los detenidos y el material asegurado fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) y la Fiscalía General del Estado de Aguascalientes (FGE).
Reacción violenta en el estado
Como respuesta al operativo, se registraron múltiples actos de violencia en diferentes puntos del estado.
- Bloqueos y Quema de Vehículos:
Se incendiaron vehículos para bloquear carreteras en varios municipios. La Carretera Federal 45 Norte fue bloqueada a la altura de Chicalote, en San Francisco de los Romos, con un tráiler incendiado.
También se reportó la quema de una camioneta en La Punta, Cosío, sobre la misma carretera. Otros puntos afectados fueron la Carretera Estatal 25 rumbo a Villa Juárez y el municipio de Asientos, donde se prendió fuego a una camioneta, y la comunidad El Novillo, donde camiones de una empresa fueron quemados.
- Ataques a Tiendas de Conveniencia:
Varias tiendas Oxxo fueron atacadas con bombas molotov o gasolina. Se reportaron entre cinco y seis tiendas incendiadas, incluyendo una en la colonia Guadalupe Peralta que fue "totalmente consumida", otra en La Ribera (San Francisco de los Romos), y una más en el bulevar Siglo XXI, en la salida a San Luis Potosí.
No se registraron personas lesionadas ni detenidos en estos incidentes específicos. Además, un depósito de venta de cerveza y una tienda de abarrotes también fueron atacados.
La jornada violenta de este sábado se sumó a otros incidentes registrados la noche del viernes y la madrugada del sábado:
- Balacera en Villas de Nuestra Señora de la Asunción: Se reportaron detonaciones de arma de fuego, que culminaron con la detención de cuatro personas armadas.
- Homicidio en Margaritas, Jesús María: Un hombre conocido como ‘El Galicia’ fue asesinado a balazos dentro de su domicilio.
Las autoridades, incluyendo el Gabinete de Seguridad de México, reafirmaron su compromiso de mantener la paz y tranquilidad en el estado, asegurando que no habrá impunidad. Se intensificaron los patrullajes y sobrevuelos con los helicópteros Fuerza Uno y Halcón Uno para "restablecer el orden y garantizar la seguridad".
El secretario de Gobierno, Antonio Arámbula, señaló que estos bloqueos y ataques son una "estrategia de la delincuencia para tratar de distraer a las autoridades". Como medida de precaución, algunas instituciones como el Grupo Tecnológico Universitario y empresas de transporte público suspendieron actividades. La vecina entidad de Zacatecas también implementó un operativo anti-bloqueos y reforzó la vigilancia en las carreteras fronterizas.
A pesar de que Aguascalientes se encuentra entre los primeros lugares de seguridad a nivel nacional, la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del INEGI, indica que el 42% de sus habitantes percibe inseguridad.
¿Por qué es relevante el tema?
Contexto: la violencia ocurrida el 26 de julio en Aguascalientes es relevante por varias razones clave que trascienden el ámbito local. En primer lugar, rompe con la imagen de estabilidad y seguridad que históricamente ha caracterizado al estado, uno de los más seguros del país según índices oficiales.
La reacción del crimen organizado —con narcobloqueos, quema de vehículos y ataques coordinados a tiendas Oxxo— evidencia una capacidad logística y operativa preocupante, lo que representa una amenaza directa al orden público y la gobernabilidad.
El operativo que desencadenó esta respuesta violenta no fue menor: participaron fuerzas federales, estatales y municipales, con apoyo aéreo, y resultó en la detención de 18 personas y el decomiso de armamento pesado. Esto sugiere la presencia de estructuras delictivas más complejas y arraigadas de lo que se creía en la región.
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Además, el uso de tácticas de terror —como los ataques a comercios— busca desestabilizar y enviar un mensaje de fuerza tanto a las autoridades como a la sociedad civil. La suspensión de clases y del transporte en algunos municipios, así como el despliegue de operativos en estados vecinos como Zacatecas, muestra que el impacto es regional y no aislado.
Finalmente, este episodio expone la fragilidad del llamado “efecto vitrina” de seguridad en Aguascalientes, y plantea preguntas sobre la capacidad real del Estado mexicano para contener la expansión del crimen organizado incluso en zonas consideradas “tranquilas”.
VGB
