En un ambiente familiar y festivo, con música, piñatas, y cientos de kilos de carne asada, más de 5 mil personas se reunieron la tarde y noche de este sábado 17 de mayo en la Plaza de los Tres Poderes de Méxicali para protestar contra la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila.
La manifestación, convocada en redes sociales como una "carne asada masiva", fue organizada en rechazo a la inseguridad que se vive en el estado y como respuesta a la reciente revocación de la visa estadounidense de la mandataria morenista. Con el lema de “¡Marina, ya nadie te quiere!” y pancartas con frases como “Un poco de decencia no hace daño, Marina”, los asistentes exigieron paz y buen gobierno.
Contexto: el retiro de la visa estadounidense a la gobernadora Marina del Pilar Ávila se dio a conocer en medio de crecientes tensiones diplomáticas por los presuntos vínculos de funcionarios mexicanos con redes de corrupción o crimen organizado. La mandataria confirmó el pasado domingo que su visa fue cancelada por el Departamento de Estado de Estados Unidos, aunque aclaró que ella no ha cometido ningún delito. Según sus declaraciones, la revocación estaría relacionada con una “situación” vinculada a su esposo, Carlos Torres Torres, exdiputado federal.
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Les apagaron la luz
La protesta se desarrolló de manera pacífica, en un entorno de convivencia colectiva. Hubo asadores, nopales, elotes, cebollitas, música en vivo y hasta una cabina improvisada con una visa ficticia llamada “Yosi Cruzo SinPro Blemas”, donde los asistentes podían tomarse fotos.
De acuerdo con publicaciones locales, acudieron también grupos de oposición y figuras del Partido Acción Nacional (PAN), quienes incluso donaron kilos de carne y financiaron la música en vivo para amenizar la protesta. Aunque la participación fue mayoritariamente ciudadana, la presencia de actores políticos marcó parte del evento.
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Al caer la noche, se reportó que el alumbrado público de la plaza fue apagado, lo que causó molestia entre los asistentes. Como respuesta, muchas personas encendieron las luces de sus celulares y continuaron coreando consignas. Algunos manifestantes incluso amagaron con dirigirse al domicilio de la gobernadora, aunque hasta el momento no hay confirmación oficial de que esto haya ocurrido.