Cinco personas, tres civiles y dos policías municipales, murieron este lunes 21 de abril al interior de un pozo en la localidad de Santa María Yutandú, perteneciente al municipio de Tezoatlán de Segura y Luna, al norte de Oaxaca. Un adolescente logró sobrevivir y se encuentra hospitalizado.
Las víctimas fueron identificadas como Pedro Ortega Girón, de 53 años y propietario del pozo; su hijo Omar Ortega Pérez, de 16 años; el vecino Perfecto Alonso Castro, de 39; y los policías municipales Norberto Rivera Montesinos, de 44 años, y Víctor Fabricio Martínez, cuya edad no ha sido confirmada.
Alexis Flores Torres, de 16 años, fue rescatado con vida y trasladado de inmediato a un hospital. Su estado de salud no ha sido informado oficialmente.
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La cadena de rescates que terminó en tragedia
Contexto: De acuerdo con los primeros reportes, el accidente ocurrió cuando Pedro Ortega cayó accidentalmente dentro del pozo de surtimiento, ubicado en el terreno de su purificadora de agua. Su hijo Omar descendió para intentar ayudarlo, pero también quedó atrapado. Luego bajó un vecino, Perfecto Alonso, quien tampoco logró salir.
Tras el llamado de auxilio, tres elementos de la policía municipal acudieron al lugar y descendieron para realizar labores de rescate. Solo uno logró salir: Alexis Flores. Los otros dos policías fallecieron en el intento.
El pozo tiene una profundidad aproximada de 12 metros. Personal del Heroico Cuerpo de Bomberos acudió al sitio para coordinar el rescate. De manera preliminar, se presume que las muertes ocurrieron por la inhalación de gases tóxicos acumulados al interior.
Casos similares en Oaxaca
Este tipo de tragedias no es nueva en el estado. En marzo de este año, los hermanos Emilio y Juventino C.S., de 54 y 48 años, murieron mientras realizaban labores de limpieza en un pozo en el municipio de Santa Lucía del Camino, en la zona metropolitana de Oaxaca.
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Según los informes de bomberos, uno de los hombres descendió al pozo para desazolvarlo y se desvaneció por inhalación de gases. Su hermano bajó para rescatarlo, pero también perdió la vida.
