DERECHOS LGBT+

La despedida de Hanna Fernanda, activista trans que dedicó su vida a defender los derechos LGBT+

Hanna Fernanda Cervantes, joven activista trans y funcionaria de la Secretaría de Gobernación de Puebla, fue despedida con homenajes y mensajes de cariño tras su fallecimiento; a los 24 años, fue pionera en la defensa de los derechos LGBT y símbolo de lucha por la igualdad y la justicia social

Escrito en ESTADOS el

PUEBLA.— Con profundo dolor, familiares, amigos y compañeros de lucha despidieron este lunes a Hanna Fernanda Cervantes Cervantes, una joven activista trans de 24 años que dedicó su vida a defender los derechos de la comunidad LGBT+ en Puebla. Su cuerpo fue velado en la capital del estado, mientras cientos de mensajes de despedida y condolencia inundaron las redes sociales.

Familiares, amigos y activistas despidieron en Puebla a Hanna Fernanda Cervantes, símbolo de la lucha por los derechos LGBT+. Foto: Cortesía.

Hanna Fernanda trabajaba en la Dirección de Diversidad Sexual de la Secretaría de Gobernación estatal (Segob) y era reconocida por su constante labor en favor de la igualdad y el respeto. La noticia de su fallecimiento causó conmoción entre activistas, políticos y periodistas que conocían su compromiso con las causas sociales.

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Antes de partir, dejó una carta póstuma que fue publicada el 3 de noviembre en su perfil de Facebook, donde se despidió de sus seres queridos con un mensaje que reflejaba su tristeza y cansancio emocional. “Hoy decido ya no continuar, a voluntad propia porque ya estoy cansada, estoy cansada de no ser la mejor persona, la mejor amiga, la mejor estudiante; la mejor trabajadora, la mejor hija”, escribió.

En su texto, Hanna confesó sentirse frustrada por no lograr sus metas a pesar del esfuerzo. “Me cansa saber que nunca voy a lograr ser algo, a pesar de que me esfuerce, a pesar de que apoye. Me frustra saber que no podré hacer algo; también extraño mucho a mi papá”, escribió con una sinceridad que conmovió a quienes la leyeron.

Una vida dedicada a la visibilidad y la justicia

A lo largo de su corta pero intensa trayectoria, Hanna Fernanda se convirtió en una voz poderosa dentro de la comunidad LGBT+ poblana. En mayo de 2025, participó en una rueda de prensa con motivo del Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia, donde con megáfono en mano exigió a las autoridades que no minimizaran los casos de violencia por orientación sexual e identidad de género.

Con flores, banderas y mensajes de amor, la comunidad LGBT+ rindió homenaje a la memoria de la joven activista trans. Foto: Cortesía.

“No es suficiente. Aún existe omisión en muchos casos donde, por ser una mujer trans, un hombre trans o una persona lesbiana, gay o no binaria, hay crímenes que siguen siendo carpetazos y nuestras autoridades no les dan el seguimiento adecuado”, expresó entonces, firme y decidida.

Fernanda fue la primera mujer trans en estudiar la Licenciatura en Administración Pública y Gestión para el Desarrollo en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP). Además, estaba afiliada a Morena y colaboraba con diversas asociaciones civiles en temas de inclusión, derechos humanos y políticas públicas con perspectiva de género.

Compañeros de trabajo y activistas la describieron como una mujer generosa, empática y valiente, que jamás dudó en alzar la voz por quienes no podían hacerlo. “Querida, hoy te despedimos con todo nuestro amor y respeto. Fuiste una verdadera pionera, una luchadora incansable. Tu valentía rompió barreras e inspiró a muchos”, escribió en redes sociales la activista Verónica Ponce.

Tres mujeres, tres tragedias en menos de dos semanas

El fallecimiento de Hanna Fernanda ocurre en un contexto alarmante: tres mujeres se han quitado la vida en Puebla en menos de dos semanas, revelando una preocupante crisis de salud mental en la entidad.

Entre el 22 de octubre y el 3 de noviembre, La Silla Rota documentó tres casos. El primero fue el de Yusvely Marianny Núñez Rodríguez, de 20 años, quien se lanzó de un puente después de publicar un mensaje de despedida en sus redes sociales. Días más tarde, el 26 de octubre, Mary Cruz, de 25 años, se suicidó tras una discusión con su pareja, no sin antes cometer el terrible acto de quitarle la vida a sus dos hijos pequeños.

Hanna Fernanda fue recordada por su valentía y compromiso con la inclusión y la igualdad en Puebla. Foto: Cortesía.

Estos sucesos contrastan con las declaraciones del gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, quien el pasado 18 de septiembre aseguró que los casos de suicidio habían disminuido en comparación con años anteriores. De acuerdo con datos oficiales, entre enero y septiembre de 2025 se registraron 123 suicidios, frente a los 354 de 2024 y 370 en 2023.

Sin embargo, las tragedias recientes han encendido las alertas sobre el impacto de la depresión, el estrés y la falta de atención psicológica, especialmente entre jóvenes y mujeres. Colectivos feministas y organizaciones LGBT+ han pedido que las autoridades activen protocolos de salud mental con perspectiva de género y brinden acompañamiento a las familias.

Dónde buscar ayuda

Ante esta ola de casos, especialistas y autoridades han reiterado la importancia de pedir ayuda a tiempo. La Línea de la Vida, un servicio telefónico gratuito de atención en salud mental y adicciones, está disponible las 24 horas del día, los 365 días del año, a través del número 800-911-2000.

En Puebla, también se puede acceder a orientación psicológica mediante el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del estado y a través de organizaciones civiles como Mega Help, que brinda apoyo a personas con depresión y ansiedad a través de sus redes sociales.

La muerte de Hanna Fernanda deja un vacío inmenso en la comunidad LGBT+ poblana. Su lucha, su voz y su ejemplo permanecerán como un llamado urgente a la empatía, a la acción y a la defensa de la vida y la dignidad de todas las personas, sin importar su identidad o condición.

En sus últimas palabras, pidió cuidar de su madre. En su recuerdo, amigos y compañeras prometen cuidar también de sus banderas, de su causa y de la esperanza que sembró: la de un mundo más justo y amoroso para todos.