Monterrey.- Las autoridades abrieron una investigación en torno a la muerte de un niño de seis años que presuntamente, murió asfixiado al jugar con familiares a las escondidas.
El cuerpo de Anderson fue encontrado por su familia en el fondo de un cesto de ropa, en su casa de la calle China, en la Colonia Nueva Esperanza, en el municipio de Escobedo, al norte de la zona metropolitana.
De acuerdo a los familiares que declararon ante la Policía Ministerial, el pequeño Anderson jugaba con dos primos a las escondidas el domingo alrededor de las 22:00, sin embargo, los hechos se dieron a conocer este martes.
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El silencio que alertó al abuelo
En el domicilio también estaba el abuelo Juan Antonio Beltrán, de 55 años, quien comentó a los agentes que los pequeños jugaban a las escondidas y los escuchaba gritar, reír y correr por toda la casa hasta que, en determinado momento, hubo silencio.
Cuando ya no los escuchó, fue a ver qué pasaba, por lo que encontró a dos de sus nietos, a quienes les preguntó por el juego y éstos le dijeron que ya habían terminado.
Enseguida les preguntó por Anderson, a lo que recibió por respuesta que no sabían dónde estaba, que no lo habían encontrado, y entonces se dedicó a buscarlo.
El pequeño fue encontrado por el abuelo, inconsciente en el fondo de un cesto bajo ropa, donde aparentemente, se habría escondido durante el juego.
De inmediato sacó del cesto a su nieto y lo trasladó a una clínica ubicada por la Avenida Camino Real, donde pese a las maniobras médicas de resucitación cardiopulmonar, ya no reaccionó y fue declarado muerto.
Otros casos recientes de muertes accidentales
Las investigaciones preliminares de los agentes investigadores presumen que la muerte se debió a la asfixia al meterse en el cesto de ropa para esconderse de sus primos.
Sin embargo, serán los estudios forenses los que determinarán más causas de la muerte del menor de edad.
Contexto: En lo que va del año se han registrado otros dos casos de muerte por accidente de menores; el primero en abril pasado en el municipio de Apodaca, cuando en una fiesta familiar una mujer que bailaba empujó sin darse cuenta a un menor de poco más de un año, el cual se golpeó la cabeza.
Y en agosto pasado, en el municipio de García, un bebé de un año cayó en una tina de agua y se ahogó.