TUXTLA GUTIÉRREZ. - Claudia Sheinbaum Pardo viajaba este domingo hacia el municipio de Motozintla, Chiapas como parte de su campaña con rumbo a la Presidencia del país cuando un grupo de personas “encapuchadas”, detuvo la marcha de su automóvil, para hacerle peticiones, entre éstas mayor seguridad.
La imagen de la morenista generó muchas versiones. Incluso, este lunes, en su tradicional conferencia de prensa o “mañanera”, Andrés Manuel López Obrador, mandatario federal, aseguró que lo ocurrido a la aspirante presidencial se trató de un montaje.
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De hecho, la misma exjefa de Gobierno capitalino lo advirtió en una entrevista posterior, cuando expuso que se le “hacía raro” lo que le ocurrió, sobre todo porque entre quienes la interceptaron, apareció el micrófono de un medio informativo con el que tienen diferencias porque ha sido crítico con esta administración.
En un “post”, Patricia Armendáriz, diputada federal que acompañó a Sheinbaum a su mitin político, contó la experiencia que le ocurrió con ese tema:
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“En el camino de Comitán a Motozintla nos pararon unos encapuchados de uno de los cárteles en pugna en la zona, cuidando su territorio. Apóyenme a descifrar, ¿Cómo acabar con esto tan destructivo? Amatenango de la Frontera, Belisario Domínguez y Motozintla son los más afectados”.
Pese a que el Ejecutivo federal minimizó el acontecimiento, otras voces, consultadas por La Silla Rota, evidenciaron que el ver gente encapuchada y armada en las carreteras de las regiones Fronteriza y Sierra de Chiapas, es de lo más común que se vive en el estado y esto no es un un montaje.
La cruda realidad
Un reportero, cuyo nombre se omite para evitar represalias, contó a La Silla Rota que sí acudió a la cobertura y detalló lo vivido
este domingo con los “encapuchados” fue real, “sentí miedo, sí eran ‘narcos’”, pues incluso había algunos, escondidos en las montañas, que portaban armas y radios” dijo.
En otro video que ha circulado, un grupo de periodistas que viajaba en otra camioneta al mismo acto político de Sheinbaum, también fue detenido por gente cubierta del rostro, misma que les hizo una breve revisión.
Víctima cuenta experiencia
Mauricio, como le llamaremos al familiar de un desaparecido en Frontera Comalapa desde hace un par de años, relató que, si las personas ya no denuncian, es porque tienen miedo, “pero la situación en Comalapa, Motozintla, Chicomuselo, y toda esta región, sigue igual o peor”.
Sobre lo que le ocurrió a Claudia Sheinbaum, externó que no se trató de un montaje “ni del gobierno, ni de Latinus (medio de comunicación), como López Obrador lo dice. Es real, pero es gente del ‘tres letras’, y lo que hacen es quejarse de sus contrarios, los que están en Comalapa”.
La violencia escala
El panorama es tan oscuro, aceptó, que ahora existe una persecución especial contra miembros de la religión denominada Testigos de Jehová, a quienes intentan obligar para que voten por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en las próximas elecciones.
Inclusive, detalló que en el ejido Rodulfo Figueroa, municipio de Frontera Comalapa, donde el 60 o 70 por ciento de pobladores profesan ese credo, el cártel dominante ya entró y les dio un ultimátum para dejar sus propiedades al no acceder a su demanda, si no quieren morir.
De acuerdo con la página web JW.ORG (Jehovah’s Witnesses, en inglés), los testigos de Jehová tienen motivos religiosos, basados en la Biblia, para no involucrarse en asuntos políticos.
“No constituimos un grupo de presión política, no votamos por ningún partido o candidato, no nos presentamos a las elecciones para ocupar un cargo público y no promovemos cambios en el poder”, dejan en claro.
De nueva cuenta, Mauricio evidenció que incluso, de una escuela de ese lugar ya se dieron de baja 30 alumnos, pues el temor es mayúsculo; “hablamos del ejido más grande de la región, donde habitan como 2,500 personas, y donde un cártel en específico (pidió no revelarlo) tiene el control”.
Génesis de la disputa
Al menos desde hace tres años, comenzó en Chiapas una guerra por el control del territorio por parte de dos cárteles, el de Sinaloa y el Jalisco Nueva Generación. La situación se recrudeció con el asesinato de Gilberto Rivera Maravilla, “El Júnior”, hijo de quien fue lugarteniente del CDS, Gilberto Rivera Amarillas, en un hecho ocurrido en julio de 2021.
A partir de ese momento, se han desatado los enfrentamientos entre sicarios, las desapariciones y otros actos violentos e intimidatorios, que mantienen a la población chiapaneca en zozobra, tanto que, la mayor parte de las regiones de la entidad están controladas por ambos grupos.
Tan grave es el asunto que la propia Embajada de los Estados Unidos en México emitió, en lo que va de este año, tres alertas para que no visten algunas regiones de Chiapas; la última se registró el fin de semana pasado, precisamente durante la llegada de Claudia Sheinbaum en su primer día de gira por este estado.
Lamentable evadir la realidad
Para Gerardo González Figueroa, investigador de El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), afirmó que es lamentable que el mismo presidente AMLO evada, de una manera lamentable, una realidad que no tiene ideología porque se trata de una “guerra de cárteles”.
“Pero no te puedes hacer un lado; entender que, además, no es una guerra nuestra, pero el problema es que nos está llevando entre las patas a todos y a todos: periodistas, ciudadanos, mujeres, contra todos, es terrible y hay que verlo en esa dimensión”, aseveró.
Lo más sorprendente e incluso risible, puntualizó, es que una candidata de ese nivel no “sepa” que hay retenes en esas regiones, y cuáles de éstas están dominadas por ciertos grupos.
El académico, conocedor de la materia, apuntó que en la zona Sierra y parte de la Fronteriza el dominio es del Cártel de Sinaloa, mientras en otros lados esté posicionado el Jalisco Nueva Generación; “el Ejército hace muchas cosas, pero se retira, y cuando eso pasa viene otra vez el control del cártel dominante”.
“Pero que el presidente llame a esto montaje, hay que preguntarse, ¿montaje de quién? ¿De Latinus? Lo único que te puedo decir es que no es montaje, y lo único que se demuestra es que la candidata vio la realidad que vivimos en Chiapas”.
Para él, en Chiapas, y sobre todo en regiones como la Sierra y Fronteriza, no existen grupos autodefensas, sino más bien cárteles, y lo peor: gente inocente se ha adherido a ellos por temor, “o porque les quieren reclutar al hijo, o por muchas razones más; porque esos ‘grupos autodefensas’ no te van a decir: ‘Somos del Jalisco Nueva Generación’, ¡pues no!”
De acuerdo con datos recabados de fuentes oficiales y de medios de comunicación locales que llevan un registro de los asesinatos que se dan casi a diario en la geografía chiapaneca, en lo que va de este mes se han registrado más de 50 homicidios dolosos, es decir un promedio de más de dos casos por día; en la mayoría de éstos, se advierte, ha habido tortura y uso de arma de fuego.
En la actualidad, el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RN) advierte que, en Chiapas, hay 1,175 personas en esa condición; en los primeros sitios están: Jalisco (14,978), Tamaulipas (13,172), Veracruz (6,885), entre otros. A nivel nacional, hay 119,965 personas en esas condiciones.
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