TUXTLA GUTIÉRREZ.- Fredi Guadalupe viajó, el pasado 2 de marzo, de su pueblo natal, Acalá, hacia la capital de Chiapas, donde se vería con un amigo; sin embargo, desde esa fecha, sus familiares y allegados no saben nada de él. Como el licenciado en Economía trabaja por lo regular en Oaxaca como supervisor de obra, sus ausencias en su hogar son constantes, y por eso muchas veces pasan desapercibidas. No obstante, en esta ocasión fue diferente, pues visitaría a un amigo en la colonia Ruiz Ferro, en Tuxtla.
Víctor Hugo Pérez Torres lamentó que, a la fecha, la Fiscalía General del Estado (FGE) sea omisa y no haya hecho, al menos, el rastreo a través de las cámaras del C-5, para tratar de ubicar a su hermano Fredi Guadalupe, de 29 años de edad.
Enrique Ricardo, otro de los hermanos del desaparecido, recordó que ese día, a las 9 de la mañana, Fredi tomó el transporte en la colonia Frontera del Grijalva, en Acala, para dirigirse a Tuxtla, “el 6 de marzo tendría que volver a su chamba, en Oaxaca, pero pasó esa fecha, le comenzamos a marcar y nunca contestó”.
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Lo más extraño, refirió, es que vieron cómo aparecía conectado o “en línea” en la aplicación WhatsApp; sin embargo, comentó que el 13 de marzo decidieron acudir a la FGE para presentar una denuncia por desaparición.
Un día después, los hermanos y otros familiares se dirigieron a la casa del amigo donde según estaría Fredi Guadalupe, pero no obtuvieron buenos resultados. De hecho, esa persona primero advirtió que no había llegado, y luego les dijo a sus familiares que sí estuvo con el joven.
Pese a que se sabe dónde fue la última vez donde estuvo el egresado de la Universidad Autónoma de Chiapas, la autoridad no se ha movilizado para hacer las investigaciones correspondientes.
Al contrario, dijo Enrique, son ellos mismos quienes han hecho las pesquisas, pues la FGE les ha negado el rastreo del teléfono celular con el argumento que es un proceso algo tardado. “Como familiares, hemos hecho nuestra parte; hasta corremos peligro”.
El único avance que se tiene es una ficha de búsqueda de una de las páginas de la Fiscalía llamada: “¿Has visto a..?”, pero no ha enviado o solicitado información a hospitales, a morgues o a otras instancias para dar con el paradero del mismo.
EVIDENTE DISCRIMINACIÓN
De acuerdo con Enrique, no solo han tenido que soportar la incertidumbre de no saber dónde está su familiar, sino además se enfrentan a una evidente discriminación institucional.
Advirtió que una secretaria de esa dependencia se burló de su hermana solo porque esta último le solicitó que agilizaran las investigaciones. “La señora se empezó a reír”.
Víctor y Enrique, inclusive, puntualizaron que aportaron los datos de la compañía donde trabaja Fredi para que la Fiscalía hiciera su chamba; “y el gerente les dijo puras cosas buenas de mi hermano, que es trabajador, responsable y que tiene buen comportamiento”.
En su caminar, coincidieron, hay personas que aseguran haberlo visto, sin embargo, cuando recurren a la Fiscalía, esta instancia no se mueve.
Lo peor de todo, apuntó Iván, amigo de la familia, es que no les han entregado una copia de la carpeta de investigación, pues ahora la autoridad argumenta que está en el proceso de integrarla. “Son muchos días ya, no se tiene información concreta. Entonces, ¿Cómo podemos confiar?”
Aunque por el momento solo han acudido a la FGE, los denunciantes dijeron que, si no obtienen una respuesta positiva, presionarán hasta que vean los avances.
De acuerdo con Enrique, esa dependencia tiene todas las herramientas tecnológicas para agilizar el tema de la localización, sin embargo, cuestionó por qué no lo hace.
Incluso, comentó que ya dialogaron con el titular de la Fiscalía de Desaparecidos, quien les prometió que los ayudaría, pero, evidenció, tampoco ha cumplido su palabra.