Tamaulipas.- “Felina” tenía muchos seguidores en redes sociales, en sus posteos alertaba a la población de la actividad de los cárteles del narcotráfico en Tamaulipas. En octubre de 2014 un comando la levantó, hackearon su cuenta de Twitter y publicaron una fotografía de su supuesta muerte. A la fecha sigue desaparecida.
“Felina” vivía en Reynosa, ciudad fronteriza de Tamaulipas, donde son constantes los enfrentamientos a balazos entre criminales del Cártel del Golfo y los Zetas, pero los medios tradicionales no daban cuenta de la violencia.
Para los periodistas, informar sobre lo que acontecía en las calles era una cuestión de vida o muerte; en 2010 un puñado de ciudadanos –resguardados tras el anonimato de las redes sociales–comenzaron a alertar a la población de situaciones de riesgo.
La doctora María del Rosario Fuentes también abrió una cuenta de Twitter con el seudónimo de “Felina” (@Miut3) y el avatar de Catwoman, una antiheroína que a menudo aparece haciendo cosas incorrectas por las razones correctas.
María del Rosario, era una treintañera robusta, de piel blanca, ojos grandes y una abundante melena lacia, que vivía con intensidad y gustaba de hacer labor social.
En una de sus posteos escribió: “Hay dos cosas que no se pueden negar en la vida, estar feliz y estar borracho. Yo estoy feliz, porque soy tamaulipeca, porque amo a mi comunidad, amo mi trabajo, amo mis valores... Y todos los días trabajo para hacer de mi pedacito de Tamaulipas un lugar mejor”.
María del Rosario se convirtió en influencer sin descuidar a su pareja, a la pequeña hija de ambos y su trabajo como doctora. Intrépida, valiente y noble, alertó a muchos de situaciones de riesgo, pero se confió y delincuentes armados, presuntamente del Cártel del Golfo, descubrieron su identidad y la desaparecieron.
Tuitera con sentido social
La doctora tenía “un sentido de responsabilidad social muy fuerte; es el tipo de persona que uno se siente orgulloso de conocer y ser su amigo; desafortunadamente, confiaba mucho en las personas”, dijo en entrevista realizada en octubre de 2014, uno de los administradores de “Valor por Tamaulipas”.
El administrador explicó que el 1 de enero de 2012 se crearon las cuentas de Facebook y Twitter “Valor por Tamaulipas” para avisar a la población sobre balaceras y presencia de civiles armados en Tamaulipas.
María del Rosario no colaboraba en “Valor por Tamaulipas” y “ella no me conocía a mí, por lo menos yo no le dije mi identidad, pero yo sí la conocía a ella, porque inicialmente participó desde su cuenta personal (@Miut3)”, señaló.
A mediados de 2012 nacieron dos cuentas aliadas a *Valor por Tamaulipas*: Esperanza por Tamaulipas y Responsabilidad por Tamaulipas, a Fuentes Rubio se le invitó a administrar la segunda y la doctora aceptó con agrado.
“Responsabilidad por Tamaulipas está para apoyar causas nobles que requieran la participación ciudadana responsable y en verdad estoy encantada de ser la administradora de esta página y de interactuar con ustedes”, le comentó en aquella ocasión María del Rosario.
Todos los días "Felina" posteaba desde muy temprano, saludaba e invitaba a sus seguidores a interactuar. Intercalaba peticiones de enfermos que requerían donadores de sangre con mensajes personales y motivacionales; publicaba fotos de personas extraviadas, así como campañas de prevención de males, como cáncer y dengue.
Los fines de semana escribía de la importancia de la familia y llegó a publicar una imagen donde convivía con la suya.
Criminales tras los creadores de contenido
En febrero del 2013 comenzó a circular un volante en el que un grupo criminal ofrecía una recompensa de 600 mil pesos para aquella persona que aportara datos exactos para la localización del creador y administrador de "Valor por Tamaulipas".
Dos meses después, las tres cuentas aliadas Valor por Tamaulipas, Responsabilidad por Tamaulipas y Fortaleza por Tamaulipas dejaron de publicar. Después retomaron la actividad y por seguridad, Fuentes Rubio fue removida de la administración de Responsabilidad por Tamaulipas.
Al dejar la administración de “Responsabilidad por Tamaulipas”, la doctora María del Rosario tuiteaba desde su cuenta personal.
Descubren su identidad y la desaparecen
El 15 de octubre de 2014, la doctora María del Rosario Fuentes (@Miut3) fue secuestrada cuando terminaba su labor en una clínica de Reynosa. Al siguiente día, en su cuenta de Twitter aparecieron mensajes que llevaron a suponer que habían descubierto su identidad y la mataron.
“Amigos y familiares, mi verdadero nombre es María del Rosario Fuentes Rubio. Yo soy doctora, hoy mi vida ha llegado a su fin”.
“Cierren sus cuentas, no arriesguen a sus familias como lo hice yo, les pido perdón”, leía otro de los mensajes en el perfil de Fuentes Rubio, quien llevaba como seudónimo “Felina”.
Los mensajes estaba acompañados de dos fotos de una mujer: en una miraba a la cámara y en otra aparecía aparentemente muerta. Tras ocho años de que ocurrió ese suceso, no se ha vuelto a saber de la doctora y la cuenta fue cerrada.