MÉRIDA.- Niñas de 11 a 14 años, que resultaron embarazadas a consecuencia de una violación, o algún delito como estupro, se convierten en madres impulsadas por la Asociación Vida y Familia Yucatán A.C. (VIFAC). Su presidenta en Yucatán, Melba Rosa Abraham Achach, sostiene que es “por voluntad propia”, a pesar de que las menores son victimas de abuso sexual.
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Aunque Abraham Achach afirma que sólo intervienen si las niñas deciden maternar, las denuncias penales no siempre se presentan, a pesar de tratarse de un delito. En la VIFAC la aplicación de la NOM 046 no es opción, es decir, la interrupción legal del embarazo.
{"quote":"Tratamos de que, si son violadas, más si es por alguien que vive en su casa, se lleve a cabo esta denuncia y se detenga a esta persona, porque no es posible que cada día tengamos niñas más jóvenes"}
{"quote":"Hace poco tuvimos a una niña de 11 años que una persona en su casa abusaba de ella y tuvo a su nene. Tenemos niñas de 13 y 14 años, que viven en un entorno que muchas veces no saben ni siquiera que son violentadas. Las apoyamos en lo que todos ellas requieran para tener a ese nene bien y que puedan salir adelante junto con ellas"}
La presidenta de VIFAC justifica que muchas veces la denuncia penal contra los agresores de estas menores no es posible porque las víctimas “no quieren”; las leyes en la materia establecen que se deben de seguir de oficio.
Vida y Familia A.C. es la institución privada que más adopciones tramita en el país; una organización en contra del aborto, que se presenta como asociación civil que ayuda a mujeres embarazadas para recibir donativos del gobierno. Incluso, dependencias públicas le abren las puertas para dar pláticas en donde se promueve la abstinencia como método anticonceptivo.
¿IGNORANCIA?
Al respecto, Amelia Ojeda Sosa, activista y coordinadora jurídica de la Unidad de Atención Sicológica, Sexológica y Educativa para el Crecimiento Personal (UNASSE), explica que todas las organizaciones que brindan atención a mujeres violentadas están obligadas a conocer el marco normativo de protección.
Ignorarlo deliberadamente, advierte, es obstaculizar los derechos de las mujeres y peor si son menores.
{"quote":"El estado, DIF, la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (PRODENNAY) y los programas de atención a personas en situación de violencia, que coordina la secretaría de Salud de Yucatán, deberían estar vigilantes de que no se imponga esa maternidad"}
Explicó que asociaciones, como VIFAC, que se anuncian como protectoras de maternidades y reciben a niñas y adolescentes embarazadas por violaciones, están obligadas a garantizar el acceso de las menores a sus derechos, como la interrupción legal del embarazo.
{"quote":"Por supuesto que las autoridades saben lo que pasa con las menores, porque los servicios de salud pública llevan a cabo su control de embarazo, por supuesto que la autoridad lo sabe"}
Aseguró que el Estado debe vigilar que la sociedad civil cumpla el marco legal, más si se trata de asociaciones que trabajan con recurso público y con niñas y adolescentes víctimas de delitos sexuales.
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