El rescate de los diez mineros que se encuentran atrapados en un pozo de carbón en la mina El Pinabete, en Sabina, Coahuila, ha sido suspendido, según confirmó “extraoficialmente” la titular de la Secretaría del Trabajo (Setra) del Estado, Nazira Zogbi Castro.
La funcionaria detalló que los trabajos de rescate habrían sido suspendidos desde la semana pasada, y el motivo sería que va a llegar otra empresa foránea a continuar con los trabajos”, dijo para el Siglo de Torreón.
El gobierno mexicano confirmó a inicios de agosto que suman 10 los mineros atrapados y 5 los lesionados que lograron salir tras el derrumbe en una mina de carbón en el municipio de Sabinas.
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El 3 de agosto pasado, la abrupta entrada de agua de un pozo de carbón en el predio El Pinabete inundó el socavón. Cinco trabajadores fueron expulsados al exterior por el impacto del agua y diez más siguen atrapados a más de 60 metros de profundidad.
El derrumbe se dio por la perforación de una pared de una mina contigua abandonada que contenía agua almacenada y que ocasionó su derrumbe e inundación, según Protección Civil.
Para finales del mes de septiembre, mineros del pozo de carbón El Pinabete, que trabajaban en un turno diferente a los que resultaron afectados por la inundación del 3 de agosto, fueron indemnizados con 5 mil 800 pesos de liquidación.
Los mineros diariamente obtenían alrededor de 750 pesos por cinco toneladas extraídas de carbón –cada una pagada a 150 pesos– tenían derecho a una indemnización más alta.
“Es extraoficial”: Secretaria
“Estamos enterados, de manera extraoficial que, efectivamente, pararon los trabajos de rescate”, afirmó la secretaria y dijo desconocer la fecha en la cual se podrán reanudar los mencionados trabajos.
El motivo del cambio de empresa sería que la Comisión Federal de Electricidad habría incurrido en falta de pago a la empresa responsable del rescate, "pero bueno, esa información al final del día es extraoficial”, dijo Nazira Zogbi Castro.
Ser minero en Sabinas
En la región carbonífera de Coahuila, gran parte de la vida gira en torno a la extracción de este mineral. Actividad con la que muy pocos –los empresarios– se embolsan las ganancias millonarias, pero muchos –los mineros víctimas de los derrumbes, explosiones, inundaciones; o los “marcados”, como les llaman a los enfermos de los pulmones– pagan las consecuencias de explotar la tierra, escribió Marco Antonio Martínez en La Silla Rota.
“Sabes cuándo entras, pero no cuándo sales”, se escucha decir a varios mineros y exmineros alrededor de los pozos de extracción de El Pinabete, ubicado en el municipio de Sabinas, hace un mes ocurrió el más reciente siniestro que dejó 10 trabajadores atrapados por una inundación y que aún permanecen bajo tierra, por lo que la esperanza de hallarlos con vida es nula.
En realidad, desde los primeros días, mineros experimentados que acudieron al lugar para brindar ayuda decían que era “muy difícil sobrevivir a esa inundación”, en un pozo del cual ni siquiera se tienen planos, que ya había registrado inundaciones, que está al margen del Río Sabinas y a un lado de la enorme mina abandonada Conchas Norte.
“Se puede estar sin agua y sin comida, pero ¿sin aire?”, dijo a La Silla Rota, el 13 de agosto, don Antonio Cabriales, padre de Mario Alberto, uno de los mineros atrapados. Él fue de los últimos familiares en retirarse de los campamentos, el 29 de agosto, cuando el Equipo Interinstitucional de Rescate les informó que los trabajos en el pozo podrían durar hasta 11 meses.
(djh)