MÉRIDA.- Mónica podría ser la primera víctima de violencia digital que tendrá justicia en Yucatán. Este lunes, una jueza obligó a la Fiscalía General del Estado (FGE) a no dar carpetazo a su caso. Apenas en diciembre, habían determinado el ejercicio de la no acción penal, sin finalizar las diligencias.
Ella denunció en el 2019, que once compañeros de su salón de clases robaron un video íntimo de una conversación de Facebook y lo difundieron por Whatsapp. Buscó ayuda en la escuela, pero solo la confrontaron con los agresores. Ese mismo año denunció en la Fiscalía, a casi tres años, no pasó nada. Feliz por este primer paso aseguró que su lucha va por todas.
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“Esperemos que la Fiscalía ahora sí investigue, ya depende de ellos hacer su trabajo y si no lo hacen ahí quedaría de nuevo. Nosotras no vamos a dejar de estar marchando y actuando. No vamos a dejar de insistir para que mi caso se judicialice y no me quedaré de brazos cruzados”, comentó en entrevista.
En el camino la acompañó su madre, Carolina; quién al igual que Mónica quiere justicia. Lamentó que para las autoridades los delitos digitales no sean urgentes por resolver. Para ellas se trata de una de tantas batallas ganadas.
(Mónica y su madre, Carolina)
“Estoy muy feliz, al final el beneficio es para todas, esto apenas continúa y es para que las demás pierdan el miedo y quienes necesiten busquen apoyo donde quieran, para eso son las marchas que se acerquen y pregunten, no están solas”, declaró.
A los once agresores de Mónica se les investiga por cometer delitos contra la intimidad personal, contemplado en el artículo 243 bis 2 del Código Penal del Estado de Yucatán. No existe nadie sentenciado por estas agresiones- digitales- en el estado. Hasta noviembre del 2021, dos personas denunciaron por este delito.
El caso de la joven confirmó la falta de perspectiva de género de la FGE para investigar y llevar estos procesos. Incluso obligarla a promover un control judicial fue revictimizante.
“Lamentablemente hubo una cerrazón y falta de perspectiva de género, no solamente a la hora de entender la naturaleza del delito, sino también de investigar en realizar actos de investigación. Sin duda este ejercicio de la no acción penal fue revictimizante para la víctima, para la familia, entonces esperamos que esto sea un precedente importante de cómo debe conducirse la autoridad investigadora cuando tengamos una víctima de esta naturaleza”, manifestó el asesor legal de Mónica, René Ramírez Benítez.
(djh)