En México hay 14 ultrarricos mexicanos, cuya fortuna supera los mil millones de dólares de riqueza, la cual, desde el inicio de la pandemia aumentó hasta casi duplicarse. Carlos Slim, el hombre más rico de la región, con una fortuna mayor que los otros 13 ultrarricos mexicanos juntos. La fortuna conjunta de Carlos Slim y Germán Larrea creció en 70% durante los últimos cuatro años, hasta representar casi seis de cada 100 pesos de la riqueza privada en el país, cifra equivalente a la riqueza de la mitad de
la población más pobre de América Latina y el Caribe, unas 334 millones de personas.
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Países que conforman la Plataforma Tributaria para América Latina y el Caribe (PTLAC), discutirán en junio próximo la propuesta histórica de establecer un impuesto global a los ultrarricos, así como medidas de tributación justas para la región como el aumento de los impuestos a los más ricos, la revisión de los beneficios fiscales y la implementación de impuestos ambientales.
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En las últimas dos décadas, los ricos se han hecho más ricos y los pobres, mucho más pobres. De acuerdo con un nuevo análisis de Oxfam, América Latina y el Caribe es la región con la brecha de desigualdad más grande por encima de otras regiones como África Subsahariana, el Sudeste Asiático o el Norte de África y Medio Oriente.
Diego Merla, coordinador de Justicia Fiscal de Oxfam México dijo a La Silla Rota: "La excesiva concentración del poder económico guarda una estrecha relación con el poder político: los ultrarricos en México lo son, sobre todo, por décadas de gobiernos que han renunciado a regular su acumulación de poder e influencia. Ha prevalecido la relación de conveniencia entre la clase política y la élite empresarial. Hay faltado voluntad política".
La fortuna de Germán Larrea, el segundo hombre más rico de la región y del México, refiere Oxfam, se incrementó en 125 % en términos reales desde el inicio de la pandemia (en 2020). Así, las fortunas conjuntas de Carlos Slim y de Germán Larrea han crecido en 70% en poco menos de cuatro años, con lo que la suma de ambas es hoy equivalente a la riqueza total en manos de la mitad más pobre de América Latina y el Caribe, cerca de 334 millones de personas.
Oxfam México advierte que, las decisiones económicas del poder político, que ha renunciado a regular la acumulación de poder e influencia de las grandes empresas, impactan directamente en los bolsillos de la enorme mayoría de la población. Además de su efecto en los precios, este mayor poder económico les permite incrementar las ganancias de sus accionistas. Así, en México, uno de cada cinco pesos del valor agregado de las empresas se destina a los dividendos, el doble que en Alemania o Brasil.
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Así, las grandes corporaciones usan su poder económico para:
1. Evadir los impuestos que deberían pagar. El poder económico de las grandes empresas se traduce en poder político, que les permite influir en las reglas del juego de su relación con el Estado mexicano, como en el injusto sistema fiscal que les permite disminuir —legal o ilegalmente— el pago de sus impuestos.
2. Privatizar los servicios públicos. Las grandes empresas ejercen una presión constante al sector público para profundizar la mercantilización de servicios básicos de provisión de derechos, educación, atención médica y el acceso a agua potable.
3. Agravar la crisis climática. Muchos de los ultrarricos, se benefician económicamente de procesos intensivos en la emisión de gases y compuestos de efecto invernadero. Mientras que las personas en situación de pobreza, discriminación y racialización sufren desproporcionadamente los efectos de la crisis climática, los ultrarricos
siguen invirtiendo en industrias extractivas y contaminantes.
Los ricos de México
De acuerdo con Oxfam México, las personas con fortunas de más de 1,000 millones de dólares, a quienes llaman “ultrarricos”, concentran 8.18 de esos 100 pesos de riqueza en México. De ellas, sólo Carlos Slim acapara 4.48 pesos. La
fortuna de Slim es equivalente a la de la mitad más pobre de la población, que suma casi 64 millones de personas. Las
293,980 personas en México con fortunas arriba de un millón de dólares, a quienes se denomina “ricos” y que incluye a
los ultrarricos, concentran casi 60 de esos 100 pesos:
- Carlos Slim: 4.48
- Germán Larrea: 1.34
- Ricardo Salinas Pliego: 0.61
- Alejandro Bailláres: 0.38
- María Asunción Aramburuzavala: 0.29
- Antonio del Valle: 0.18
- Rufino Vigil: 0.15
- Carlos Hank Rhon: 0.15
- Juan Domingo Beckmann: 0.15
- Fernando Chico Pardo: 0.13
- Karen Virgina Beckmann: 0.10
- Roberto Hernández: 0.08
- David Peñaloza: 0.07
- Alfredo Harp Helú 0.07
Impuestos a la riqueza
Brasil, como presidente del Grupo de los 20 este año, planteó la implementación de un impuesto mínimo global sobre el patrimonio de los multimillonarios, el cual serviría para financiar el combate al aumento de las temperaturas y la pobreza en países de ingresos bajos y medios.
El economista francés Gabriel Zucman propuso un plan de imponer un impuesto mínimo del 2% a los multimillonarios del mundo, un grupo compuesto por unas 3,000 personas. Aunque Diego Merla planteó que "habría margen de una tasa de hasta el 8% para que se reduzca la extrema concentración de la riqueza". Explicó que al final, a los ultrarricos conviene que haya mayor distribución de la riqueza, porque entonces hay mayor movimiento en la economía.
Riqueza negativa
Diego Merla, de Oxfam México destacó que muchas más personas viven al día o tienen riqueza negativa, esto es, tienen más deudas que bienes personales.
En contraste, el grupo que acumula fortunas de más de un millón de dólares —a quienes se denominan “ricos”—, lo conforman unas 294,000 personas, lo que equivale aproximadamente a la población de Pachuca.
"Las personas ricas en México, que representan a una de cada 500 en el país y que incluyen a los ultrarricos mexicanos, concentran casi 60 de cada 100 pesos de la riqueza privada en México".
El experto en temas fiscales dijo que "En México sí hay dinero, pero está concentrado en pocas manos. Si no hubiera corrupción y se recaudará eficientemente, podría haber una mejora importante en el PIB de recaudación".
Calificó como un esfuerzo "loable" la estrategia del SAT para eficientar la recaudación. A propósito de ello, el SAT dio a conocer que, la recaudación tributaria en el primer cuatrimestre de 2024 alcanzó un billón 766 mil 612 millones de pesos, lo que representa un incremento de 165 mil 161 millones de pesos en comparación con el mismo periodo de 2023, es decir, un crecimiento
real de 5.5 por ciento, con lo cual "se cumplió la meta proyectada en la Ley de Ingresos de la Federación (LIF), al recaudar el
100.1 por ciento".
Sin embargo, hace falta "apretar" la recaudación con los grandes contribuyentes. Los ciudadano de a pie, no perciben un impacto en su entorno con el pago de impuestos.