A unas horas de la Navidad, muchas personas entran en un estado de estrés por causa de las expectativas que una celebración de esta naturaleza puede provocar. Con poco tiempo para culminar las compras para la ocasión, el riesgo de caer en compras de pánico suele ser mayo a medida que se acercan las celebraciones de fin de año.
Las compras de pánico en Navidad representan esas adquisiciones de último minuto que la gente realiza para cumplir con compromisos previamente adquiridos.
Ya sea regalos o productos comestibles, cercana la Navidad o el Año Nuevo, es común ver a personas comprar con un considerable grado de estrés y con el riesgo de hacer gastos más elevados que si hubieran planificado, perder tiempo en grandes filas o no encontrar los productos que se buscan.
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Estas estresantes compras de pánico se suman a gran derrama económica que se espera durante estas fechas en nuestro país, que para este año se calcula en 560 mil 800 millones de pesos de acuerdo con estimaciones de Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur).
Evita las compras navideñas de pánico
Para evitar las compras de pánico en Navidad, hay algunas acciones que se pueden llevar a la práctica, a continuación se enumeran algunas de ellas.
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- Elabora una lista de los regalos y productos que necesitas adquirir. Si elaboras esta lista con anticipación, puedes ir palomeando las compras que ya realizaste, buscar los mejores precios y evitar las prisas o sobrecostos que pueden representar las compras de pánico.
- Buscar horas no tan concurridas para hacer tus compras. De esta manera puedes evitar las aglomeraciones y encontrar en los estantes los productos que buscas adquirir. Para que también evites las largas filas, puedes optar por tiendas locales y no necesariamente grandes almacenes.
- Optar por compras en línea. Si se hacen a través de comercio electrónico, las compras se pueden planificar mejor y con mayo control. Sin embargo, también debes tener cuidado para no comprar excesivamente. Y es que en línea, la posibilidad de completar una compra que no se necesita siempre puede ser latente.
- No tratar de generar expectativas tan altas. En ocasiones, con tal de cumplir con compromisos, las personas están dispuestas a desembolsar grandes cantidades de dinero. Muchas veces es mejor, relajarse, esperar un mejor momento para hacer las compras y resolver con imaginación la falta de algún regalo, platillo o ingrediente.
- Aprovechar los descuentos que están por llegar. Muchas tiendas comienzan con sus ventas de remate justo unas horas después de la llegada de la Navidad. Si ya no pudiste hacer la compra antes de la fiesta de Nochebuena, es probable que si esperas unas horas, puedas adquirir determinados productos a precios mucho más bajos.