Arturo Elías Ayub es mucho más que el yerno del empresario Carlos Slim. Elías Ayub siempre ha sido un apasionado de los negocios. Él ha declarado que su pasión por los negocios nació desde que era niño, pues su padre tenía una empresa de uniformes y telas en el Centro Histórico de la Ciudad de México, y desde pequeño lo llevaban a administrar el negocio y ver cómo funcionaba.
En una entrevista para el podcast Cracks, de Oswaldo Oso Trava, se le cuestionó cómo fue su inicio en los negocios: "Ha sido mi pasión, mi ilusión desde muy chavito, vender dulces en la reja de mi casa, literal, a los tres años, había en Polanco, en el parque enfrente de la Iglesia de San Agustín, había un tianguis y yo rentaba un puesto y le pedía a mi mamá todos los roperazos que le sobraban y los ponía en el puesto”.
Sin embargo, es claro al advertir la diferencia entre la pasión por cerrar tratos y la pasión por el dinero. "La pasión por cerrar un trato siempre a mí me causó una adrenalina tremenda”.
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Elías Ayub también contó que desde pequeño acompañaba a sus padres a comprar productos de papelería al mayoreo, para posteriormente revenderlos en su colegio. Incluso, el empresario Carlos Slim describió a Elías Ayub, en el prólogo del libro de su Yerno, El Negociador, "Arturo, quien fuera un mal alumno y que por su inteligencia, curiosidad e hiperactividad se aburría y distraía en el salón de clases, resulta ahora un gran maestro con este corto, ameno y sustancial manual para negociar en su sentido más amplio, incluyendo el empresarial”.
Arturo Elías Ayub estudio Administración de Empresas en la Universidad Anáhuac, y un posgrado en Alta Dirección de Empresas en el Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE).
Con el paso del tiempo, Elías Ayub, se ha convertido en una de las figuras más representativas de los negocios en México, y ganó más popularidad por su participación en el programa Shark Tank México, en el que analizaba y negociaba la vialidad de los proyectos presentados por parte de pequeños emprendedores mexicanos.
Los consejos de un empresario
El empresario ha dado cinco consejos que seguro te serán de gran utilidad:
1. Un consejo que vale "Oro": Siempre cuida tu nombre
“Hacerte de un nombre como una persona honrada, que cumple, que no engaña, honesta, es poco a poco y todos los días de tu vida, ¿y sabes cómo lo pierdes? con una que hagas chueca, con una transita, mentirita, mentirota, ahí pierdes ese nombre que fuiste forjando durante los años. Créeme, no hay activo más valioso en tu vida, que tu nombre, yo conozco a esos mega empresarios mexicanos con los que nunca haría un negocio y conozco gente que sé que hacer un negocio con ellos va a funcionar, porque son honestos, no me van a engañar y no me van a tranzar”.
2. Involúcrate con tu producto y tu cliente
“No hay como tú personalmente conocer qué está pasando con el cliente y con tu producto, mi consejo es: arremángate, vete al punto de venta y ve por qué no se está vendiendo y pregúntale a la gente que pase por el pasillo donde está exhibido: ¿oye lo viste?, ¿te gusta?, ¿por qué te gusta? ¿por qué no te gusta? ¿sientes que está caro?, ¿piensas que no sirve para nada? De esa forma te darás cuenta por qué no tienes las ventas que quieres”.
3. Conoce tus números
“Conoce los números como la palma de tu mano, prefiero que no empieces un negocio, aunque tengas una idea brillante. Saber tus números es conocer perfectamente que está pasando en tu negocio, es una radiografía que te ayudará a saber dónde están tus ingresos, dónde estás vendiendo más, tus gastos, dónde necesitas cortas gastos, etc. Ten mes a mes un estado de resultados y conoce bien los números de tu negocio”.
4. Nunca te desanimes
“Vas a tener mil fracasos y mil caídas, yo no puedo contar las veces que me la he partido emprendiendo y haciendo negocios. El chiste es aprender de cada fracaso, aprende de cada caída, levántate con más ganas y di, ‘voy para adelante’. Ahora, sí te caes todo el tiempo y ves que no jala, lo que tienes que hacer es cambiar de negocio. Pero aprovecha las caídas para que sean un gran aprendizaje, entre más veces te caigas, más te servirá para ir hacia adelante”.
5. Trabaja duro
“Si quieres ser empresario tienes que rajártela y además conocer cada parte, cada detalle de tu negocio. De chavito mi papá me llevaba a su tienda de telas y me ponía en la bodega a cargar bultos para almacenarlos, saber el orden y entender por qué iban de esa forma, me ponía a cobrar, hacer ventas en mostrador midiendo cada metro, pero sólo así pude conocer el negocio como la palma de mi mano, para que esto sea posible, sólo lo puedes lograr trabajando duro”.