Cada vez está más cerca la llegada de la Navidad y todo lo que ello implica: gastos en regalos y la tradicional cena navideña, pero ¿sabías el rico pavo que servirás en la mesa el próximo 24 de diciembre puede deducible de impuestos?
De acuerdo con Pamela Castro, contadora especialista en impuestos y fundadora de Cooltura Fiscal así es como puedes hacer deducible este rico y tradicional gasto:
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Toma nota:
Deducible como previsión social
En este caso, de acuerdo con la especialista, esta prestación se debe otorgar en beneficio de los trabajadores y de forma general, entre otros requisitos. No es deducible al 100%, así que revisa los Arts. 7, 27 fracc. XI. y 28 fracc. XXX. de la Ley del ISR.
Como obsequio a clientes
"Siempre que esté relacionado a la enajenación de bienes o prestación de servicios, es decir, que tenga relación con tu emprendimiento y además, que sea entregado a tus clientes de manera general".
Como costo de lo vendido
Si te dedicas al giro de la comida y durante este mes estarás ofreciendo paquetes de cenas navideñas o para Año Nuevo, puedes hacer deducible el pavo y demás ingredientes y materias primas que ocupes para su preparación ya que es parte de tu costo.
Gastos indispensables
De acuerdo con el artículo 27 fracción I de la Ley de Impuesto Sobre la Renta, se considerarán como gastos indispensables aquellos estrictamente necesarios para los fines de la actividad del contribuyente, salvo que se trate de donativos no onerosos ni remunerativos, que satisfagan los requisitos previstos en esta Ley y en las reglas generales que para el efecto establezca el SAT.
En otras palabras, las empresas pueden deducir los siguientes gastos navideños:
- Cena de fin de año
- Regalos para los empleados (sorteos en la cena de fin de año y aquellos que se entregan a todos como pavos, piernas y otros apoyos)
- Adornos navideños, en especial si estos son colocados en áreas como aparadores o donde se reciben clientes.
La Ley en el artículo 28, fracción III, establece que los regalos para los clientes son deducibles, siempre y cuando, estén directamente relacionados con la enajenación de productos o la prestación de servicios y que sean ofrecidos a los clientes en forma general.