Cerca de finalizar el 2022, las señales económicas de crecimiento aún no terminan de contentar a la mayoría de los actores económicos. Esto puede verse, por ejemplo, en los movimientos en las cotizaciones de divisas que se suceden a diario, quitándole previsibilidad a los movimientos de los pequeños y medianos ahorristas e inversores. Ahora bien, las nuevas tecnologías tienen una solución al alcance de nuestra mano.
En el último tiempo ha crecido de forma exponencial la cantidad de mexicanos y mexicanas que invierten en línea, sobre todo utilizando su teléfono móvil. Esta alternativa vio su gran pico de crecimiento durante los meses de lo peor de la pandemia, en donde buscar alternativas al congelamiento de la economía se volvía más que imperioso.
Pasado el Coronavirus, el hábito ha quedado entre los pequeños y medianos inversores, que encuentran en estos mercados digitales las señales que los canales tradicionales no pueden brindarles todavía. El trading, por ejemplo, es una de las estrategias más elegidas: comprar y vender activos financieros en un corto lapso de tiempo para obtener ganancias.
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Sin embargo, no se puede hablar de un único tipo de trading, ya que existen diferentes variables. A continuación, nos adentraremos en uno de los más solicitados y complejos al mismo tiempo: el trading institucional. ¿De qué se trata y cómo se puede acceder a él?
¿Qué es el trading institucional?
Es probable que hayas escuchado hablar más de una vez de esta variante de trading, como puede ser el caso de una nueva acción en la Bolsa que se ha reservado únicamente a los inversores institucionales. Sin embargo, muy pocas veces se termina de aclarar este concepto, sembrando un manto de dudas sobre el mercado. ¿Qué es y por qué se diferencia del trading minorista?
Para empezar, podemos definir al trading institucional como la venta y compra de diversos activos financieros, pero realizada por instituciones a través de sus propios traders. Esta práctica es común en las grandes firmas, quienes suelen contar con equipos especializados. Integrados por analistas y por operadores, intentan realizar los mejores análisis fundamentales y técnicos para luego poner en práctica la estrategia más adecuada.
Como es de suponerse, los operadores de estas firmas cuentan con un fondo de inversión más que elevado, lo cual les permite disfrutar de dos ventajas: la primera, la capacidad de diversificación en sus operaciones para poder evitar grandes pérdidas en el caso de que se dé un paso en falso.
En segundo término, al ingresar una suma abultada de dinero, les brinda la capacidad de obtener mejores precios en la toma de posiciones, así como influir de forma directa en la tendencia de los precios en el mercado. Es por ese mismo motivo que muchas veces se observa qué batalla se da entre los traders institucionales a la hora de instalar un clima de mercado.
El método para que eso suceda es el siguiente: si un mercado se presenta alcista para su análisis, deciden entrar con posiciones largas, tal y como se suele hacer en el caso de traders minoristas. Sin embargo, cuando se opera con una suma elevada, se influencia para que la tendencia alcista realmente se concrete.