De acuerdo con Barclays México, el crecimiento de la economía nacional durante el presente sexenio podría ser cercano al 0 por ciento debido en gran medida al efecto negativo de la pandemia, además de que se descartó una fuerte depreciación del peso frente al dólar.
“Para el sexenio, la tasa promedio (de crecimiento) va a ser cercana a cero”, señaló el economista en jefe para América Latina, Gabriel Casillas.
Asimismo se detalló que estas previsiones se mantendrán siempre y cuando el resultado de un Producto Interno Bruto (PIB) sea de entre dos por ciento y 2.5 por ciento en el 2024.
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“Yo le pondría un peso del 80 por ciento por la pandemia”, puntualizó al explicar el resultado sexenal para la economía y que le hubiera tocado a cualquiera independientemente de quién estuviera al frente del gobierno.
(Foto: Cuartoscuro)
De igual forma se señaló que los pronósticos del banco inglés en México para 2023 señalaron que el PIB avanzaría solamente 0.9 por ciento lo cual implicaría que para el primer trimestre sería de cero por ciento y posteriormente una tasa negativa del -0.1 por ciento para el segundo.
Para el resto del año, tercero y cuarto trimestre, sería positiva de 0.4 por ciento de forma respectiva.
Por otro lado se ha estado proyectando para el 2022 una expansión económica de 2.5 por ciento en donde se espera que entre julio y septiembre, el PIB sea de 0.7 por ciento y para el cuarto trimestre haya un aumento del 0.1 por ciento.
¿HABRÁ INFLACIÓN DE 8.4 POR CIENTO PARA 2022?
Asimismo se ha señalado que respecto a la inflación, se estima que ésta terminará el presente año en 8.4 por ciento y para el 2023 en un nivel de 5.7 por ciento.
Es así que el especialista de mercados emergentes en Barclays, Eric Martínez, señaló que están anticipando un tipo de cambio de 19.65 pesos por dólar para el 2022 y para el siguiente año será de 19 pesos.
(Foto: Cuartoscuro)
Dicha fortaleza del peso mexicano frente al dólar se encuentra sustentada en la parte diferencial de tasas de interés con Estados Unidos que siendo atractivas fuentes externas y fiscales sólidas y un contexto político estable.
Finalmente se ha recalcado que en estos momentos, los inversionistas no están evaluando en sus decisiones el factor de la sucesión presidencial en México.
CAO