Este 5 de marzo se cumplió un año de aquel penoso acontecimiento en La Corregidora de Querétaro que cimbró al mundo entero. En aquel momento, la Liga MX comunicó que tomaría medidas extraordinarias ante el grado de violencia que se desató entre los aficionados de los Gallos Blancos y los Rojinegros del Atlas. Sin embargo, hasta el momento, lo que más ha generado estruendo, son las pérdidas millonarias que ha tenido el conjunto queretano.
En aquel momento, la Comisión Disciplinaria tomó la determinación de sancionar a los Gallos Blancos con un año sin jugar con aficionados en las tribunas de La Corregidora. Desde entonces, los Querétaro han podido ver cómo han registrado un total de 28 millones de pesos solo en cuestión de boletos. Mientras que en el caso de los souvenirs que usualmente se consumían antes de cada partido, estacionamiento y vendimia dentro del inmueble supone una pérdida mayor.
Recientemente se dio a conocer, que tras haber cumplido la sanción de un año sin publico en La Corregidora, los Gallos Blancos no pudieron disputar el partido de la Jornada 10 del Clausura 2023 de la Liga MX con aficionados en las tribunas; esto debido a que la directiva de Querétaro no dio a conocer un plan que garantizara la seguridad de los aficionados que acudirían al recinto.
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De tal manera que el impacto que han tenido los Gallos Blancos solamente se ha resumido en el aspecto económico, ya que las sanciones impuestas por las autoridades pareciera que no han marcado un precedente en el fútbol mexicano; pues incluso el FAN ID que tanto promovieron los altos mandos de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) sigue sin ser obligatorio en este Clausura 2023.
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¿Qué ha cambiado desde la tragedia en La Corregidora?
Los 72 detenidos que en su momento fueron detenidos por las autoridades correspondientes el se encuentran libres y sin sanción penal. La única restricción que recibieron a raíz de aquellos actos de violencia que se desataron en La Corregidora fue no poder ingresar a ningún estadio dentro de la Liga MX, además de que la mayoría de casos concluyeron en una suspensión condicional o por procedimiento abreviado, pero con sentencia condenatoria.
De acuerdo con el Tribunal de Justicia (TSJ) a los detenidos se les imputaron los delitos de tentaviva de homicidio, violencia en espectáculos deportivos y apología del delito. A pesar de ello, hoy, todos se encierran libres.