Cruz Azul se ha caracterizado por ser un equipo protagonista cuando se habla de fichajes. Desde antes de que los equipos regios, Tigres y Monterrey se robaran los reflectores, La Máquina se “peleaba” a los mejores jugadores junto con América en el fútbol mexicano.
Sí bien, la institución cuenta con nombres históricos como Miguel Marín, Alberto Quintano, Julio Zamora, Christian “Chaco” Giménez y César “Chelito” Delgado, hay otros casos de jugadores que arribaron a la noria con altas expectativas y al final se marcharon “sin pena ni gloria”.
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Los 5 peores fichajes de Cruz Azul
Roque Santa Cruz ha sido uno de los últimos grandes nombres que arribaron a La Máquina para poder convertirse en referentes. Sin embargo, desde que llegó el paraguayo en 2015 su estancia estuvo inmersa en lesiones. En total, el ex jugador del Bayern Múnich, Manchester City, entre otros, solo estuvo un semestre en Cruz Azul, logrando jugar 10 partidos y marcando solamente cuatro tantos, números alejados de las expectativas con las que arribó.
Martín Cauteruccio fue otro de los grandes delanteros que llegó con la etiqueta de “estrella” y que al final terminaron decepcionado. Luego de disputar el Mundial de Clubes con San Lorenzo de Almagro, las expectativas con el uruguayo eran altas, sin embargo, ni con Paco Jémez, Pedro Caixinha y Robert Dante Siboldi pudo consumar su mejor versión; fueron 83 partidos jugados, en donde solamente pudo marcar 11 anotaciones.
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Richard Núñez fue otro de los jugadores que no lograron llenar las expectativas del club. El charrúa contaba con las credenciales de haber jugado en el Atlético de Madrid. A pesar de que en su debut logró maravillar a propios y extraños al marcar cuatro goles, con el paso de los partidos se fue perdiendo, motivo por el cual fue prestado a Pachuca y América.
Achille Emana llegó a la Liga MX con el cartel de ser un jugador con formación en Europa y con paso en la selección de Camerún. Su debut fue uno de los temas más sonados, ya que en la altura de Toluca dejó entrever que no estaba en condiciones óptimas para poder jugar. Al final, ni Luis Fernando Tena y Guillermo Vázquez le brindaron los minutos necesarios para que pudiera consolidar la calidad y talento que demostró a cuentagotas.
“Maranhao” fue uno de los jugadores que llegaron como una incógnita, debido a que poco o nada se sabía de su carrera. Cuando llegó a México, sus dribles comenzaron a hacerse virales, sin embargo, tan sólo un año después, el jugador se terminó marchando, dejando en la memoria de los aficionados, sus fintas que causaban sensación.