Una de las deportistas que dejaron un legado en el deporte, no solo con títulos, también por luchar por los derechos de las mujeres fue Billie Jean King, una tenista histórica que fue figura y que siempre alzó la voz por la igualdad salarial en el deporte blanco.
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La tenista vivió un partido histórico cuando protagonizó en 1973 un partido que significó un gran avance por la igualdad del deporte blanco, una de las disciplinas que tienen menor brecha en los sueldos entre hombres y mujeres.
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El partido de los sexos
La tenista Billie Jean King de 29 años derrotó a Bobby Riggs de 55 años, que la había retado a un partido para dejar clara la superioridad masculina en el tenis y confirmar la teoría de que las mujeres no eran capaces, ni física, ni psicológicamente, de aguantar un partido a tres sets contra un hombre, una postura discriminatoria, machista y misógina contra las tenistas.
Y es que hace algunos años, mujeres tenistas eran ‘teloneras’ previo a los partidos de los hombres, por lo que recibían premios diez veces menores. Para acabar con eso, un grupo de tenistas fundaron la Virginia Slim International, esto les valió la expulsión de la ATP (Asociación de Tenis Profesional), dirigido por Jack Kramer, un tenista que afirmaba las mujeres debían estar en su casa y no intentando jugar al tenis.
Pero todo cambio con el partido llamado la ‘Batalla de los sexos’, así se llamó al partido entre Billie Jean King y Bobby Riggs, y más adelante fue el inicio de la WTA (Women’s Tennis Association), fundada también por King, con lo que comenzó una etapa de mayor igualdad en el tenis.
Muchos de los grandes slams pagan hoy premios iguales a hombres y mujeres. Sin embargo, aún siguen siendo discriminadas de muchas formas, como los horarios de los partidos con poca audiencia, reservando el horario estelar para los hombres.