Alejandro Irarragorri, presidente y director de Grupo Orlegi, propietario de los equipos de futbol Santos y Atlas se encuentra en la mira de la Fiscalía General de la República (FGR) por una supuesta defraudación fiscal de 17 millones 69 mil pesos.
De acuerdo con Reforma, las autoridades hacendarias presentaron una querella contra Irarragorri Gutiérrez, ya que presumiblemente a través de engaños omitió pagar el impuesto sobre la renta (ISR) de salarios a jugadores de Santos Laguna entre enero y julio de 2017.
Por ello, desde al año pasado, tanto el Servicio de Administración Tributaria (SAT) como la Procuraduría Fiscal de la Federación (PFF), llevan a cabo una investigación contra el empresario y el Club Santos por omisión de impuestos, así como el pago de forma irregular de 54 millones 22 mil 690 pesos que realizo el club a 26 jugadores e integrantes del cuerpo técnico.
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Según la indagatoria, los directivos maquinaron una estrategia para no retener ni pagar el ISR de esos depósitos, registrándolos como primas indemnizatorias de riesgo de trabajo, las cuales legalmente están exentas de dicho impuesto.
Cabe mencionar que la defraudación fiscal no amerita prisión; sin embargo, la FGR aún deberá determinar el tipo de delito, ya que este ilícito no amerita prisión preventiva forzosa por la sentencia de la Corte que anuló contra la venta de facturas falsas, contrabando y defraudación fiscal.
Demanda de Disney contra Santos
No es la primera vez que el dueño de Club Santos Laguna se encuentra en la polémica, en 2019, el equipo propiedad de Irarragorri Gutiérrez enfrentó una batalla legal con Disney quien contrademando por incumplimiento de contrato que ha interpuesto la compañía de entretenimiento, dueña de Fox Sports, podría dejar en la ruina al conjunto lagunero.
De acuerdo con el periodista Ignacio “Fantasma” Suárez, la demanda que puso la compañía estadounidense es multimillonaria, y en dado caso que el equipo de la Liga Mx pierda el caso, podría ver afectadas drásticamente sus finanzas.
Asimismo, el periodista reveló en su columna que el objetivo de Disney es comprobar que Santos Laguna intentó sabotear el canal, situación que puso en riesgo una fusión negociada en 71.3 billones de dólares, y “lo hicieron de distintas maneras, con actos continuados y simulaciones”.