FAKE NEWS

Fake news: riesgos para la democracia

La educación mediática y el fortalecimiento de la alfabetización digital son clave para discernir entre información veraz y fake news. | Arístides Guerrero

Escrito en OPINIÓN el

Entre los grandes avances de la inteligencia artificial (IA) se encuentra la capacidad de generar desinformación de manera convincente. Antes de la Era de ChatGPT, el Laboratorio de Toma de Decisiones Sociales de la Universidad de Cambridge exploraba esta posibilidad al entrenar a GPT 2 con teorías conspirativas y este produjo miles de historias engañosas pero creíbles. Incluso, la Prueba de Susceptibilidad a la Desinformación (MIST) lo confirmó.

En 2024, año electoral para distintas regiones, se desdibuja la línea entre realidad y ficción, pues la desinformación a través de la IA amenaza. Chat GPT, Bard y otras plataformas de IA generativa facilitan la difusión de noticias falsas. La desinformación generada por IA permea la política, tal como el supuesto atentado en el Pentágono en 2023 y el uso de imágenes falsas en campañas políticas.

La automatización del proceso de generación de titulares fraudulentos ha democratizado la creación de desinformación, con herramientas como el microtargeting que permiten dirigirse a audiencias específicas con mensajes persuasivos. NewsGuard, una empresa de rastreo de fake news, apunta que los algoritmos se están consolidando como “superdifusores”, pues encontró que hasta el 29 de abril se han identificado 811 sitios de noticias e información generados por IA con narrativa falsa con poca o nula supervisión humana.

Las preferencias políticas también se ven afectadas. Un equipo de investigación de la Universidad de Ámsterdam creó un video deepfake para estudiar su impacto en las preferencias políticas, este reveló que el electorado mostró actitudes más negativas hacia el político, lo que plantea serias preocupaciones sobre el uso de IA en la manipulación democrática. Si bien es cierto que los deepfakes, se utilizan con fines satíricos y aparente humor inofensivo, en un contexto político podría representar un grave riesgo. 

A nivel europeo, se cuenta con un conjunto de instrumentos para hacer frente a la manipulación de información, entre ellos: EU vs Disinfo, Brújula Estratégica y las Conclusiones del Consejo sobre la manipulación de información, todos estos contra amenazas híbridas respecto a noticias falsas y ciberseguridad.

En el panorama internacional, la Declaración Conjunta sobre Libertad de Expresión y "Noticias Falsas”, Desinformación y Propaganda se consolida como un instrumento que prohíbe la difusión de información imprecisa, ambigua o falsa.

En definitiva, la protección de la libertad de expresión es esencial en cualquier sociedad democrática, pero debe ir de la mano con la responsabilidad de combatir la desinformación y la propaganda. La educación mediática y el fortalecimiento de la alfabetización digital son clave para discernir entre información veraz y fake news. Además, es necesario un marco regulatorio equilibrado que proteja la libertad de expresión sin permitir el uso indebido de la información para manipular a la opinión pública.

Arístides Guerrero

@AristidesRodri