COP29

Acción climática: avances insuficientes

La COP29 dejó un sabor agridulce, ya que, aunque hubo avances, no están a la altura de la acción que se requiere a estas alturas del cambio climático. | Laura Rojas

Escrito en OPINIÓN el

La 29ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29), celebrada en Bakú, Azerbaiyán, del 11 al 24 de noviembre de 2024, dejó un sabor agridulce, ya que, aunque hubo avances, no están a la altura de la acción que se requiere a estas alturas del cambio climático.

Uno de los logros más destacados fue el establecimiento de un mercado global de créditos de carbono. Tras una década de negociaciones, los países acordaron crear un sistema que permita la compra y venta de créditos de carbono, incentivando inversiones en proyectos que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero. Este acuerdo incluye mecanismos para garantizar la credibilidad y efectividad del sistema, evitando la doble contabilización de reducciones de emisiones.

Además, se acordó destinar al menos 300 mil millones de dólares anuales para ayudar a los países en desarrollo a combatir el cambio climático. Este fondo tiene como objetivo facilitar la transición hacia energías limpias, la adaptación a los impactos climáticos y la reparación de daños causados por eventos climáticos extremos. Aunque esta cifra es inferior a los 1.3 billones de dólares solicitados por los países en desarrollo, representa un avance respecto al compromiso anterior de 100 mil millones de dólares establecido en 2009.

Si bien los acuerdos alcanzados en la COP29 representan avances, han sido objeto de críticas. Algunos países en desarrollo y activistas consideran que los compromisos financieros son insuficientes para abordar la magnitud de la crisis climática. Por ejemplo, India y Nigeria expresaron su descontento, calificando el acuerdo financiero de injusto, y la ministra colombiana de Medio Ambiente y Desarrollo, Susana Muhamad, dijo: “Esta fue una COP en la que primó todo tipo de intereses geopolíticos, menos el clima y por eso, también parte del resultado es la meta de financiación más modesta a la que se podía llegar”.

Por otro lado, el Comisario Europeo para la Acción Climática, Wopke Hoekstra afirmó que la COP29 marcará el inicio de una nueva era en financiación climática, destacando la importancia de reducir emisiones manteniendo el consenso alcanzado en la COP28 sobre el "fin de los combustibles fósiles". Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, elogió el acuerdo por impulsar la transición hacia energías limpias y centrarse en los más vulnerables. Joe Biden calificó el pacto como "histórico", atribuyéndolo al liderazgo estadounidense, y António Guterres, secretario general de la ONU, reconoció avances, pero señaló que esperaba mayores compromisos en financiación y mitigación, destacando que el acuerdo debe cumplirse plenamente y a tiempo.

Desde la firma del Acuerdo de París en 2015, las emisiones de CO2 relacionadas con la quema de combustibles fósiles han aumentado un 8%. A pesar del incremento en el uso de energías renovables, las emisiones globales continúan en ascenso, con un aumento estimado del 0,8% para 2024. Esto indica que el mundo aún no está alineado con los objetivos del Acuerdo de París, que busca limitar el calentamiento global a 1.5-2 grados Celsius. Al contrario, informes recientes señalan que la temperatura media global entre enero y septiembre de 2024 superó en 1.54 grados Celsius a de mediados del siglo XIX, y se prevé que 2024 sea el año más caluroso registrado. Estos datos subrayan la urgencia de intensificar las acciones climáticas.

México se unió a Canadá, Chile, la Unión Europea, Noruega, Suiza y Georgia en un esfuerzo conjunto para garantizar que las próximas Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) estén alineadas con la trayectoria de 1.5°C, de conformidad con los objetivos del Acuerdo de París. Habrá que comprobar que las políticas internas y el presupuesto se alineen con la posición que ha sostenido nuestro gobierno en este foro.

Aunque la COP29 ha logrado avances, es evidente que se requieren esfuerzos más ambiciosos y acciones más rápidas para abordar la crisis climática. La próxima COP30, que se celebrará en Belém, Brasil, en 2025, será una oportunidad crucial para evaluar el progreso y fortalecer los compromisos globales. Es esencial que los países aumenten sus contribuciones determinadas a nivel nacional (NDCs) y que se establezcan mecanismos de financiamiento más robustos para apoyar a las naciones más vulnerables.

*Politóloga e internacionalista. Expresidenta de la Cámara de Diputados.

Laura Rojas

@Laura_Rojas_