Alberto Cruz maneja su auto por las noches después de cumplir su jornada laboral en una fábrica. “Trabajo de Uber porque lo que gano ya no me alcanza para cubrir todos mis gastos”, cuenta con resignación.
Alberto cuenta que fue este año cuando inició con su segundo empleo, como él, millones de mexicanos se han visto obligados a buscar otro ingreso para compensar el aumento en los precios y los salarios insuficientes, según explican especialistas.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), entre abril y junio de este año, más de 4.3 millones de personas se encuentran en condición de subocupación, es decir, necesitan y están disponibles para trabajar más horas de las que su empleo actual les permite.
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La cifra anterior significa un incremento de 400 mil personas respecto al primer trimestre, reflejo de que el ingreso es insuficiente.
“Los salarios en México son mayoritariamente de pobreza, principalmente en los trabajos mal llamados informales que son fábricas de pobreza, pero los bajos salarios también están en el sector formal”, comentó Rogelio Gómez, presidente de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
De acuerdo con Manuela Arango, directora de Marketing en Pluxee México, esta situación es resultado del incremento en los precios de bienes y servicios, lo que ha afectado el poder adquisitivo y la calidad de vida de las personas. Además, la insatisfacción laboral por parte de los colaboradores también influye en la búsqueda de ingresos complementarios.
Contexto: La subocupación laboral en México da muestra de la precariedad laboral, es decir, a millones de trabajadores con empleo formal o informal su principal fuente de ingresos no es suficiente para cubrir sus necesidades económicas, lo que refleja tanto debilidad en la calidad del empleo como retos estructurales en el mercado laboral.
7 de cada 10 no tiene ingresos suficientes
Rogelio Gómez comentó que de acuerdo con los propios datos del Inegi, las personas que trabajan y ganan salarios de pobreza, que son “insuficientes para adquirir dos canastas básicas al mes” suman 32.9 millones, que representa 67% de la población ocupada.
La situación de buscar dos empleos no es nueva, Mario Martínez, cuenta que desde hace 9 años tiene dos trabajos: “el motivo es porque un ingreso no alcanza para tener un estilo de vida bueno, con un ingreso tus gastos son muy limitados y tienes que limitarte a tener ciertas cosas”, comenta.
Mario es abogado litigante y también administra una flotilla de servicio de transporte privado (Uber).
“Un empleo no me sería suficiente para cubrir mis gastos, ya no alcanzaría a cubrir todos o en su caso me vería muy limitado”, comenta Martínez.
Persiste pobreza laboral
Rogelio Gómez comenta que el aumento en el salario mínimo desde la administración pasada ha apoyado a la reducción de la pobreza laboral, no obstante, el porcentaje que todavía está en pobreza laboral, es decir, que no ganan lo suficiente para adquirir la canasta básica alimentaria, aún es muy alto.
“Aunque se ha visto un aumento del salario mínimo en los últimos años, el incremento se ha deteriorado por la inflación. Además, los salarios profesionales se han mantenido bajos durante décadas, lo que disminuye el poder de compra”, indicó el especialista.
