La presidenta Claudia Sheinbaum recibió este miércoles en Palacio Nacional a empresarios, inversionistas extranjeros y representantes del Foro Económico Mundial (WEF) para exponer los ejes centrales de su política económica bajo el plan denominado “Plan México”.
En el encuentro, al que acudieron delegados de al menos 17 países, Sheinbaum detalló que la estrategia busca fortalecer el mercado interno, elevar el salario real, consolidar inversión pública y privada, y reducir la dependencia de importaciones provenientes de estados sin tratados comerciales.
Entre los proyectos anunciados destacan fortalecer la conectividad mediante infraestructura ferroviaria, carretera, aeroportuaria y portuaria; aumentar la capacidad energética con la CFE a 26 mil megawatts, desplegar 158 proyectos de transmisión y fijar una meta para Pemex de 1.8 millones de barriles diarios.
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¿Qué expectativas genera el “Plan México” frente al Foro?
Sheinbaum enfatizó que el plan no es solo una hoja de ruta gubernamental, sino una estrategia nacional que requiere la participación del sector privado, la academia y la cooperación internacional.
Durante su discurso, advirtió que “no puede haber prosperidad en un país si no es compartida” y abrió la puerta a que los asistentes formen parte del diseño e implementación del plan.
La coordinadora del Consejo Asesor de Desarrollo Económico, Altagracia Gómez Sierra, refirió que el Foro reconoció a México como un destino con grandes oportunidades de crecimiento e inversión internacional, y destacó que ya hay 298 mil millones de dólares en proyectos en trámite ante la Secretaría de Economía.
¿Qué reacciones ha suscitado esta reunión?
Representantes del WEF señalaron que pese a retos internacionales —como las presiones comerciales de Estados Unidos— México mantiene su atractivo para nuevos capitales.
Algunas voces empresariales han manifestado cautela respecto a la implementación real de los planes anunciados, citando desafíos como la efectividad gubernamental, marcos regulatorios y condiciones de seguridad. No obstante, la reunión fue interpretada por medios nacionales como un paso importante para reposicionar al país en la agenda global de inversión.
¿Cómo se inserta este evento en la estrategia internacional de Sheinbaum?
Este planteamiento ocurre en un momento en que México enfrenta presiones externas, especialmente de Estados Unidos, que ha mostrado interés en renegociar algunos puntos del TMEC de manera bilateral.
Sheinbaum parece apostar a un México activo en el comercio global, con énfasis en innovación tecnológica y soberanía energética, como contrapeso a posibles conflictos internacionales. Su enfoque ha sido claramente proyectar un mensaje de estabilidad, inversión y crecimiento ante actores globales.
Con esta reunión del Foro Económico Mundial, el gobierno mexicano busca cimentar una narrativa de oportunidad con respaldo internacional —claves para atraer capitales y ejecutar los planes propuestos.
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Pero el reto será convertir esas promesas en resultados tangibles en plazos razonables para fortalecer la confianza de los inversionistas y la legitimidad del proyecto nacional.
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