CONSUMO DE FENTANILO EN MÉXICO

Fentanilo ilícito cobra la vida de 3 personas en México; más de 430 buscan tratamiento contra adicción 

La Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama) señala que los principales casos de adicción a fentanilo se registran en Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Sinaloa y Sonora

Créditos: Foto ilustrativa de Cuartoscuro
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El consumo ilícito de fentanilo en México causó la muerte a 3 personas que sufrieron una intoxicación, mientras que en los últimos 2 años más de 700 personas han recibido atención por este problema de adicciones, así lo revela la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama) en su reciente informe. Esto a pesar de que en 2023 disminuyó la cifra de fentanilo que entra a México. 

A través del Observatorio Mexicano de Salud Mental y Adicciones, la Conasama realizó el “Informe  de la demanda y oferta de fentanilo en México: generalidades y situación actual”, en el que se reporta cómo ha aumentado el uso de esta sustancia de manera ilícita. 

En el informe se señala que en México, en 2023 se registraron 430 casos de atención por consumo de fentanilo, mientras que en 2022 fueron 333, los cuales se concentran en estados del norte del país como Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Sinaloa y Sonora. La Consama destaca que esto muestra que el incremento en el consumo es a nivel local, no nacional; sin embargo, resalta que la principal preocupación es en torno a su alta letalidad.

La Conasama reporta que entre junio de 2023 y enero de 2024 se registraron nueve atenciones hospitalarias por intoxicación por fentanilo, de las cuales tres personas fallecieron. Estos datos se obtienen a través del sistema de monitoreo con el código emergente U94 en todo el sistema de salud que permite detectar las atenciones relacionadas con la intoxicación por fentanilo.

Cabe recordar que en México también se cuenta con el Sistema de Alerta Temprana del Observatorio de Conasama y en el caso de Baja California el Servicio Médico Forense implementa un programa para detectar la presencia de sustancias psicoactivas en los cuerpos que ingresan a sus instalaciones. Asimismo,  la Conasama, a través del observatorio, trabaja con diversas organizaciones de la sociedad civil que realizan acciones para la reducción de daños en la frontera norte, como Prevencasa A.C. y Verter A.C., las cuales han documentado la presencia de fentanilo en las sustancias que consumían las y los usuarios de sus servicios.

Disminuye entrada de fentanilo para uso médico 

El reporte de la Conasama, con información de la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), muestra que en 2023 disminuyeron las importaciones de fentanilo para uso farmacéutico. El año pasado se importaron 1,345.46 gramos de fentanilo en materia prima y producto terminado para uso médico, menos de la mitad de lo que se importó en años anteriores, ya que en 2022 la cifra fue de 2,983.65 gramos y en 2021 de 2,903.63 gramos. 

Otro dato que se muestra en el informe es que disminuyeron los decomisos de fentanilo en 2023, pues se aseguraron 1,848 kilogramos, mientras que en 2022 fueron 2,086 y en 2021 la cifra fue de 2,018. 

Preocupa el riesgo de sobredosis: Conasama 

La Conasama también reconoce que el fentanilo es un fármaco útil en escenarios clínicos, como anestésico y como analgésico, para tratar el dolor intenso en diversas condiciones de salud. No obstante, expresa su preocupación porque se han presentado casos relacionados con el uso ilícito que, por la naturaleza de su elaboración, implica importantes riesgos en la salud.

Desde Conasama se enfatiza que “el consumo de fentanilo fuera de contextos médicos no sólo resulta preocupante por su potencial adictivo, sino también por el alto riesgo de sobredosis. Desafortunadamente, con el fentanilo ilícito se suele desconocer si la cantidad contenida en una dosis puede ser fatal o no; la identificación del riesgo de sobredosis sucede cuando ya se consumió la sustancia y provoca intoxicación aguda”.

A pesar de las limitaciones en la disponibilidad de estupefacientes y de las acciones de prevención, el consumo y uso excesivo de opioides durante las últimas décadas en los Estados Unidos tiene importantes repercusiones en la dinámica de oferta y consumo en México.

En Estados Unidos, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades informaron que de 2013 a 2019 la tasa de mortalidad relacionada con opioides sintéticos aumentó mil 40 por ciento, al pasar de 1.0 a 11.4 defunciones por cada 100 mil habitantes.