Tras la muerte del papa Francisco este lunes, a los 88 años y luego de 12 años como líder espiritual de la Iglesia católica, el cardenal estadounidense Raymond Burke suena con fuerza entre los posibles sucesores.
Burke es uno de los principales defensores de la llamada “misa tridentina”, una liturgia previa a las reformas litúrgicas de 1970, celebrada en latín y con el sacerdote de espaldas a los fieles.
Nacido hace 75 años en una familia de seis hermanos en Wisconsin, estudió Filosofía en Washington y Teología en Roma, donde fue ordenado sacerdote en 1975 por el papa Pablo VI.
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Desde joven ha manifestado su rechazo a los cambios impulsados por el Concilio Vaticano II, así como su oposición a la apertura de la Iglesia en temas como el divorcio o la inclusión de la comunidad LGBTI+.
SUCESIÓN EN EL VATICANO – COBERTURA COMPLETA
También es conocida su simpatía por Donald Trump, a quien apoyó durante la campaña presidencial de 2016 al considerar que defendía “los valores de la Iglesia”, en especial la protección de la vida desde la concepción.
Su cercanía con el líder republicano contrastó abiertamente con la postura del papa Francisco, quien fue crítico de Trump, particularmente por su propuesta de construir un muro en la frontera con México.
El conflicto entre el papa Francisco y Burke
El papa Francisco y el cardenal Raymond Burke mantuvieron una relación tensa desde el inicio del pontificado. En 2013, el papa lo retiró de la Congregación para los Obispos, organismo de la Curia Romana encargado de supervisar a los obispos y sus diócesis. Esta decisión fue criticada por Burke días después en una entrevista con la emisora católica EWTN.
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De acuerdo con información de la BBC, en 2014 Burke reveló al portal BuzzFeed que también había sido removido de su cargo como prefecto del Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica para ser nombrado Patrón de la Orden Militar Soberana de Malta, un puesto considerado “principalmente ceremonial”.
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Desde entonces, Burke se convirtió en una de las voces más críticas del papa Francisco. Cuestionó públicamente su enfoque pastoral, especialmente en temas como el aborto y el matrimonio.
“Se da la impresión, o así se interpreta en los medios, de que él piensa que hablamos demasiado sobre el aborto, demasiado sobre la integridad del matrimonio entre un hombre y una mujer. Pero de eso nunca se puede hablar demasiado”, declaró.
Burke también arremetió contra la postura más inclusiva del Vaticano hacia la comunidad LGBTI+, lo que incrementó las tensiones con el pontífice. Aunque el papa afirmó que la remoción de Burke no fue un castigo sino parte de un proceso previamente acordado, los desencuentros entre ambos continuaron.
En 2023, tras una reunión de jefes de departamento del Vaticano, se le retiró a Burke el apartamento que ocupaba sin costo en Roma, así como su salario mensual de 5,000 euros. La medida fue presentada como una “revisión de privilegios”, más que una sanción directa.
A pesar de todo, Burke aseguró no considerar al papa como un enemigo. “El papa no quiere que ocupe ningún cargo de liderazgo”, nunca tuvo la impresión de que “él me considere su enemigo”.
Burke se despide del papa Francisco
Tras la muerte del papa Francisco, Raymond Burke compartió un mensaje en su cuenta de Instagram, en el que pidió orar por el descanso eterno del pontífice.
“Unámonos a la Iglesia universal en oración por el descanso eterno del papa Francisco, quien falleció en su residencia en el Estado de la Ciudad del Vaticano. Oremos a Dios Padre para que el papa Francisco, quien sirvió como Vicario de Su Hijo Encarnado en la tierra, descanse en paz por la Divina Misericordia. Que Nuestra Señora de Guadalupe, Virgen Madre de Dios y Madre nuestra compasiva (Nican Mopohua, 26 y 30), y San José, Patrón de los Moribundos, asistan al Papa Francisco en su paso de esta vida a la vida venidera”, escribió en la red social.
Con información de EFE.