Jack Schlossberg —nieto del expresidente John F. Kennedy— anunció formalmente su candidatura al Congreso por el distrito 12 de Nueva York, actualmente representado por el veterano legislador Jerry Nadler, quien no buscará la reelección. Schlossberg se suma así a una competencia interna demócrata ya activa, apelando a su legado familiar, formación académica y presencia digital.
La posible candidatura de Jack Schlossberg representa un cruce entre legado familiar y nueva política. Proveniente de la célebre dinastía Kennedy, Schlossberg —hijo de la diplomática Caroline Kennedy y del diseñador y artista Edwin Schlossberg— se enfrenta ahora a la posibilidad de entrar en la arena electoral, algo que hasta ahora no había sucedido con él.
Su formación académica incluye estudios en Yale University y en Harvard University, pero hasta ahora no ha ocupado cargos públicos electivos.
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¿Por qué ahora?
El congreso de Manhattan de la mano de Jerry Nadler, legislador demócrata que ejerció durante más de tres décadas, presenta vacante para 2026. Nadler explicó su decisión como parte de una necesidad de “cambio generacional” dentro del partido.
Ante este escenario, Schlossberg aprovechó para lanzar un comité exploratorio y evaluar su posibilidad de candidatura.
El terreno de disputa y sus retos
El distrito 12.º de Nueva?York (NY-12) cubre zonas de Manhattan que son políticamente muy activas e influyentes.
Schlossberg no partirá sin competencia: otros aspirantes demócratas ya han dado pasos para contender, lo que plantea una primaria interna compleja.
Además, Nadler ha señalado que si bien no tiene “nada particularmente bueno o malo” respecto a un Kennedy asumiendo su escaño, considera que ese aspirante debería tener “un historial de servicio público, un historial de logro” —algo que, según él, Schlossberg aún no tiene.
Un Kennedy frente a Trump
Schlossberg ha adoptado un tono combativo, enfocado en la defensa de los valores democráticos. Calificó al actual momento como una “crisis constitucional” y se presenta como una figura que puede comunicar con efectividad en el entorno digital, donde asegura que “sabe respirar en un ambiente tóxico y contaminado”.
En redes sociales tiene más de 830 mil seguidores en TikTok y 172 mil en X, y ha usado ambas plataformas para atacar al Partido Republicano, criticar el cierre del gobierno y hasta ironizar sobre la redistritación en Nueva York.
También ha tomado distancia de su primo, Robert F. Kennedy Jr., actual secretario de Salud en el gabinete de Trump, a quien ha criticado por difundir teorías conspirativas.
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Implicaciones para el partido demócrata y para Manhattan
La entrada de un apellido como Kennedy a la contienda puede generar atención mediática, movilización y renovada competencia, pero también suscita dudas: ¿una candidaturahábil basada en legado puede superar a un aspirante con trayectoria local y experiencia política?
Para el Partido Demócrata de Nueva?York es una señal de que se abre espacio para nuevas generaciones, pero también un reto para equilibrar prestigio, experiencia y representación local.
¿Qué sigue?
Schlossberg tendrá que decidir formalmente si presenta su candidatura, construir estructura de campaña, recaudar fondos y ganar respaldo dentro de la organización demócrata del distrito. El calendario hacia la elección de noviembre de?2026 marca los plazos de inscripción, primarias y campaña general.
Mientras tanto, el foco estará también en los otros contendientes, en quién será el favorito de Nadler (si decide apoyar a alguien) y en qué estrategias emplearán para conectar con el electorado del distrito.