El gobierno de Estados Unidos informó este sábado 18 de octubre que posee reportes que señalan un posible ataque planificado por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), lo que representaría una violación del alto el fuego firmado con Israel.
Según el Departamento de Estado de EU, el ataque tendría como objetivo a civiles palestinos dentro de la Franja de Gaza. En un comunicado, la institución advirtió que esta acción vulneraría de forma directa el acuerdo alcanzado y pondría en riesgo los avances obtenidos por medio de la mediación internacional.
Estados Unidos notificó a los países garantes del pacto sobre esta amenaza y subrayó que el cumplimiento de las disposiciones del alto el fuego es obligatorio. Además, señaló que, si Hamás lleva a cabo el ataque, se adoptarán medidas para proteger a la población en Gaza y mantener la tregua establecida el 9 de octubre.
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El mensaje oficial reiteró el compromiso de Washington y de los garantes internacionales con la seguridad de los civiles y la continuidad del proceso de paz en la región.
Tensión en torno al paso de Rafah
A pocos días de la entrada en vigor del acuerdo, el cruce fronterizo de Rafah, entre Gaza y Egipto, se convirtió en un nuevo punto de tensión.
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El gobierno de Israel mantiene cerrado el paso, condicionando su reapertura al cumplimiento por parte de Hamás de la entrega de los cuerpos de rehenes fallecidos. De acuerdo con fuentes israelíes, el grupo se comprometió a devolver los restos de 28 cautivos, pero entregó menos de la mitad, y uno de los cuerpos no correspondía a los identificados.
Por su parte, autoridades de Hamás calificaron el cierre de Rafah como una infracción del pacto, pues impide la movilidad de civiles y obstaculiza las labores de recuperación de cuerpos. La organización señaló que la medida limita el ingreso de personal médico y equipos necesarios para esas tareas dentro de la Franja.
Acusaciones de incumplimiento y recrudecimiento de tensiones
El alto el fuego continúa bajo presión por acusaciones recíprocas. Mientras Estados Unidos señala a Hamás por planear un ataque contra civiles palestinos, el grupo acusa a Israel de violar la tregua en al menos 47 ocasiones desde el 10 de octubre.
Hamás afirmó que los incidentes provocaron 38 muertes y 143 heridos, atribuidos a disparos en zonas desmilitarizadas. Israel, por su parte, justificó las acciones como respuesta a ataques o provocaciones que amenazaron a su personal militar.
Fuentes locales en Gaza reportaron movimientos de las fuerzas de Hamás en áreas urbanas que fueron desocupadas tras el inicio del alto el fuego. En esas zonas, el grupo realizó detenciones y ejecuciones contra personas acusadas de colaborar con Israel, lo que generó nuevas tensiones internas.
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Futuro incierto del pacto de paz
El acuerdo firmado el 9 de octubre detuvo los bombardeos y los enfrentamientos que, durante dos años de conflicto, dejaron más de 67,000 muertos en la Franja de Gaza.
Sin embargo, la disputa sobre el control del paso de Rafah, la devolución de los cuerpos de rehenes y las denuncias de violaciones del cese al fuego ponen en duda la viabilidad del pacto.
Los países garantes mantienen conversaciones con las partes para evitar una ruptura del proceso. Observadores internacionales advierten que la situación en Gaza continúa siendo frágil y que un nuevo episodio de violencia podría anular los esfuerzos diplomáticos alcanzados en las últimas semanas.
VGB
