El presidente de Ecuador, Daniel Noboa fue denunciado ante la Fiscalía General de la República en México por el "secuestro" del exvicepresidente Jorge Glas, la denuncia fue presentada por la madre del funcionario quien fue detenido tras el asalto a la embajada de México en Quito hace un mes.
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La denuncia fue presentada en la "agregaduría jurídica" de la embajada mexicana en Madrid y abarca también a la ministra de Gobierno de Ecuador, Mónica Palencia Núñez; la juez de la Corte Nacional de Justicia Rita Bravo Quijano; el comandante general de la Policía Nacional, César Zapata Correa; y el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Jaime Vela Erazo, informó el despacho mexicano de abogados Olmedo y Torres,
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Fuentes de la embajada mexicana en Madrid consultadas por la agencia EFE sobre el asunto remitieron a la Fiscalía General de la República (FGR) en México.
La madre de Glas, Norma Espinel, se presentó a fines de abril en la legación mexicana en la capital española con su representante legal como "victima indirecta" de lo sucedido el 5 de abril, "cuando personas armadas irrumpieron violenta e ilegalmente en el local diplomático y secuestraron a su hijo", según los abogados.
En una foto publicada por el Heraldo de México, que adelantó este lunes la información sobre la denuncia contra Noboa, puede verse a la madre de Glas con su representante legal, el abogado Miguel Olmedo Robles, en la embajada de México en Madrid.
El 26 de abril, Espinel otorgó a sus abogados un poder general para pleitos y cobranzas y representar sus intereses en México.
La denuncia "criminal", según los abogados, está dirigida a quienes "resulten responsables de los delitos de secuestro agravado, desaparición forzada, tortura y violación de los deberes de la humanidad" en el caso de Glas, según la información de El Heraldo.
Glas, que fue elegido vicepresidente en 2013 y estuvo en el cargo hasta enero de 2018 con Rafael Correa como presidente de Ecuador, fue condenado por corrupción en su país.
A mediados de diciembre de 2023 Glas se refugió en la embajada de México en Quito para pedir asilo político al declararse perseguido político y víctima de 'lawfare' (utilización del aparato judicial contra adversarios políticos).
Las autoridades mexicanas le concedieron el asilo a principios de febrero pasado, pero en abril la Policía de Ecuador irrumpió en la legación para llevarse a Glas, lo que el Gobierno mexicano calificó de violación de su soberanía y del Derecho internacional, y rompió las relaciones diplomáticas con el país andino.
México planteó una demanda contra Ecuador por violación de la Convención de Viena ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya, que aun no se ha pronunciado.
Ecuador alegó ante el tribunal internacional que la entrada en la embajada mexicana fue un acto "excepcional" y "aislado" y lo justificó en que el político ecuatoriano es un "criminal común" que había sido "debidamente condenado" por delitos de corrupción.