El informe de Riesgos Globales 2024 del Foro Económico Mundial (FEM) fue un tema central entre los 2,800 representantes de gobiernos, directores generales, presidentes de consejos de administración y enviados de organizaciones internacionales que se congregaron la semana que recién concluyó en el Foro de Davos 2024 (Suiza); los 120 países, entre ellos 60 jefes de Estado, debatieron sobre clima, guerras, economía y el uso de tecnologías de punta, así como las amenazas más urgentes que se prevén en cada materia.
Esto, en marco a la alerta que hizo la organización sobre los 10 principales desafíos que enfrenta el mundo y cómo estos deben promover un diálogo de acción, evitando más fracturas mundiales.
Entre las amenazas más preocupantes que se discuten se encuentra la capacidad de respuesta al cambio climático y el impacto de contenidos falsos en un ciclo electoral para muchos países, donde prolifera la polarización social y crecen las nuevas tecnologías como desafío a las democracias.
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El Foro de Davos, también conocido como el Foro Económico Mundial (FEM), es una organización no gubernamental internacional con sede en Cologny, Suiza, donde se reúnen cada año los principales líderes empresariales, los líderes políticos internacionales, así como periodistas e intelectuales selectos, para analizar los problemas más urgentes del mundo.
Davos 2024 y los 10 desafíos más grandes del mundo
Con una agenda marcada por temas políticos, económicos, geopolíticos, climáticos y tecnológicos, líderes de todo el mundo se reunieron en la montaña suiza más famosa y custodiada, entre los asistentes y ponentes se encuentra la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; el Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky; el Primer Ministro chino, Li Qiang; el antiguo Secretario de Estado estadounidense, John Kerry; el actual Secretario de Estado, Antony Blinken; el Primer Ministro de Jordania, Bisher Hani Al Khasawneh; el Primer Ministro y Ministro de Asuntos Exteriores del Estado de Qatar, Mohammed Bin Abdulrahman Al Thani; y muchos más.
No obstante, entre todos los argumentos que se discutirán hasta el viernes, existen dos temas que centran el eje del Foro Económico Mundial (WEF, por su sigla en inglés): las llamadas "fake news" durante los procesos electorales 2024-2025 y los impactos ambientales que se observan en diferentes regiones.
En el primer caso, el WEF considera la desinformación el mayor riesgo a corto plazo, considerando que en menos de dos años más de la mitad de la población del mundo irá a las urnas (en países como México, Estados Unidos, Indonesia y Reino Unido) y será bombardeada de contenidos sospechosos y maliciosos, así como campañas de desprestigio impulsadas por la Inteligencia Artificial (IA) y la polarización social.
“Cerca de 3,000 millones de personas acudirán a las urnas electorales en varias economías –en los próximos dos años– (...) la presencia de desinformación en estos procesos electorales podría desestabilizar gravemente la legitimidad real y percibida de los gobiernos recién elegidos, generando violencia, terrorismo y una erosión a largo plazo de los procesos democráticos”, advirten.
Asimismo, viendo un reflejo de lo que pasa en América, con los recientes ascensos presidenciales y los conflictos de gobierno que han enfrentado en tan poco tiempo Daniel Noboa y Bernardo Arévalo, el estudio del WEF toma mayor relevancia al considerar que esta desinformación creciente podría generar disturbios que van desde protestas violentas y crímenes de odio hasta enfrentamientos civiles y terrorismo.
En cuanto a los riesgos que estimados por amenazas ambientales, estos ocupan dos lugares en los próximos dos años por "Eventos climáticos extremos" y "Contaminación"; sin embargo, lo preocupante es que su presencia en el ranking prevalece hasta por 10 años, pues se estima que el riesgo crezca con tres posiciones más en una década, sumando "Cambio climático en los sistemas terrestres", "Pérdida de biodiversidad y colapso de los ecosistemas" y "Escasez de recursos naturales"
Y es que en el informe de riesgos para los próximos 10 años, la desinformación, la ciberseguridad y la migración involuntaria también preocupan de aquí al 2033.