La remoción de un monumento en la Ciudad de México que conmemoraba el primer encuentro entre Fidel Castro y Ernesto “Che” Guevara ha generado un intenso debate político y social. La publicación del diario Los Angeles Times documentó tanto el contexto histórico de las esculturas como las reacciones que ha suscitado su retiro.
Las figuras de bronce, que representaban a ambos líderes revolucionarios sentados en un banco con vestimenta de combate, fueron instaladas en 2017 en un parque de la colonia Tabacalera, cerca del lugar donde se conocieron en 1955. La obra fue adquirida durante la gestión de Ricardo Monreal como jefe delegacional.
La remoción fue reportada por el diario Los Angeles Times, que destacó el carácter simbólico del monumento y la reacción polarizada entre quienes lo veían como una pieza histórica y quienes lo consideraban inapropiado en un espacio público.
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La nota firmada por Patrick J. McDonnell subraya que el episodio refleja las tensiones ideológicas persistentes en México y la forma en que la memoria histórica continúa generando debate en la vida pública.
“Fue un acto ilegal”: Sheinbaum
Durante la conferencia matutina en Palacio Nacional, la presidenta Claudia Sheinbaum calificó el retiro de las esculturas como un acto que no siguió los procedimientos legales correspondientes. “No se puede quitar una estatua si no se pasan los procesos”, afirmó.
Sheinbaum aseguró que no se solicitó la autorización del Comité de Monumentos y Obras Artísticas en Espacios Públicos (COMAEP) para realizar la remoción y atribuyó el hecho a una falta de tolerancia hacia determinadas ideologías.
Respuesta desde Cuauhtémoc: “Los espacios públicos deben ser de los vecinos”
La alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, respondió a las críticas asegurando que su decisión fue resultado de peticiones vecinales. En entrevista, dijo que le sorprendió la reacción de Sheinbaum y recordó que como jefa de Gobierno también retiró símbolos históricos, como el monumento a Cristóbal Colón.
“Quitó placas de Gustavo Díaz Ordaz y el monumento a Colón. El asesino no es menos asesino si pertenece a la izquierda”, señaló Rojo de la Vega. Además, afirmó que no existe cédula de autorización del COMAEP para la instalación del monumento, argumento que fue desmentido por el Gobierno de la Ciudad de México.
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Gobierno capitalino: se buscará recuperar y reubicar las esculturas
Clara Brugada Molina, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, anunció que se realizarán los trámites necesarios para recuperar las esculturas y reubicarlas en un espacio simbólico de la capital.
“Estas esculturas artísticas conmemoran un hecho trascendental, el primer encuentro de dos figuras fundamentales del siglo XX, cuyo legado forma parte de la memoria viva de los pueblos de América Latina”, declaró durante un acto en la alcaldía Coyoacán.
Brugada afirmó que el Gobierno de la Ciudad actuará conforme a derecho para solicitar formalmente la devolución de las piezas y reiteró que su retiro no cumplió con los procedimientos normativos.
Contexto histórico: el “Encuentro” de 1955
El monumento El Encuentro, instalado en 2017, rememoraba el primer contacto entre Fidel Castro y Ernesto Guevara, ocurrido en la capital mexicana en junio o julio de 1955, según registros históricos. Ambos eran entonces jóvenes militantes revolucionarios y ese momento es considerado por diversos sectores como un punto de partida de su posterior liderazgo en la Revolución Cubana.
Las esculturas, obra de bronce de tamaño natural, mostraban a ambos personajes sentados en un banco: Guevara con su boina característica y Castro con gorra de combatiente, cigarro y pipa en mano. La instalación del conjunto fue autorizada durante la gestión de Ricardo Monreal como jefe delegacional.
djh