Las protestas por la escasez de agua en zonas residenciales de la Ciudad de México, donde históricamente no se había presentado este problema, han agravado la preocupación sobre el problema que afecta a las 16 alcaldías de la capital. En la Miguel Hidalgo, Benito Juárez, Azcapotzalco, Cuajimalpa de Morelos y Coyoacán, enlistadas por el Coneval como las demarcaciones con los menores porcentajes de población en situación de carencia por acceso a los servicios de salud, se han expandido las protestas por la falta de líquido.
“No solo soy dueño de una propiedad, sino también tenemos negocios. La mayor parte de la gente que vive aquí son gente de la tercera edad y al ser así la afectación para nosotros es doble. También nosotros pagamos doble o triple por tener ese consumo de agua, por ser habitacional y comercial”, refiere Jorge Garcia Medina, habitante de la Miguel Hidalgo.
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En contraste con alcaldías como Milpa Alta donde se tiene registro del 34.4% de la población con carencia a servicios básicos como el agua, la Miguel Hidalgo registra al 19.7% de la población en la misma situación.
Patricia, de 50 años, quien ha vivido toda su vida en Polanco, señala que es la primera vez que en la zona se presenta un problema grave de escasez de agua. Aunque cada año, en temporada de Semana Santa el suministro se reduce, refiere que a principios de este 2024 la escasez ha sido más notoria. La zona en la que vive está rodeada de hoteles y restaurantes que necesitan mantener un atractivo de áreas verdes. Esta situación, señala, acentúa el problema porque se requieren grandes cantidades de agua para sacar a flote los negocios.
"Tenemos alrededor de 20 días con este problema. Han llegado muchas pipas para los que son hoteles, para las casas muy grandes.Racionamos el agua, a la hora de la regadera lo que sobra lo juntamos en cubetas, lo utilizamos para hacer la limpieza, para regar las plantas. Como en mi casa somos mujeres y de cabello largo, tratamos de no lavarlo seguido, sino esporádicamente. Nos bañamos un día sí, y al otro no".
Patricia asegura que la falta de líquido en la zona, no se debe a un derroche de agua por parte de los habitantes, sino a los bajos niveles de las presas que alimentan el Sistema Cutzamala.
"Siempre la hemos cuidado. El agua que sale de la lavadora la conectamos a tambos. No ha sido porque aquí se riegue a manguerazos".
Sobre Avenida Presidente Masaryk, considerada una de las zonas mas exclusivas de la Ciudad de México, rodeada de residencias y lujosos negocios, trabajadores riegan con mangueras las área verdes. La escena por sí sola presume de un lujo hídrico, donde aparentemente no se sufre de la falta de agua, sin embargo, Pedro Gonzalez, quien ha vivido en la colonia desde hace 60 años señala que desde la semana pasada comenzó a notarse la escasez de líquido en Polanco.
Se trata de una situación nunca antes vista en una de las zonas de mayor poder adquisitivo de la capital, asegura Pedro.
"Realmente es la primera vez que experimentamos esto, fue básicamente la semana pasada. El problema nos ha concientizado más en la forma de racionar el agua".
Su discurso compagina con el del alcalde de la Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe, quien el pasado 23 de enero alertó que por primera vez en la historia, hay escasez de agua en colonias como Polanco, Lomas de Chapultepec y Molino del Rey.
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En esta última colonia, los habitantes han comenzado a resentir los estragos hídricos derivado de habitar al lado de los grandes resorts del perímetro donde aparentemente la escasez de agua no es un problema.
Ariel Ponce de León, vecino de Molino del Rey, denuncia que, a pesar de que su colonia está a unos metros de la zona residencial de las Lomas, donde no ha habido cortes en el suministro, en su área la escasez sí ha sido grave.
"En esta zona no había una sola gota de agua y pasando la zona del camellón hacia Lomas de Chapultepec, sí había bastante agua. Nada más nos dividía una calle, ahí había bastante agua y aquí ni una gota". Como no nos habían informado o avisado de los cortes de agua, no tomamos la previsión de apartar agua, entonces para bañarse, para lavar trastes no ha habido. En ocasiones hubo que comprar garrafones de agua. En esta zona no se había presentado el problema, es la primera vez que ocurre algo así".
En las residencias de la Miguel Hidalgo hay una escasez de agua disfrazada, señala Elsa Martínez, quien ha habitado en Molino del Rey desde hace 40 años. Refiere que en Polanco se nota menos la falta de líquido porque los departamentos cuentan con grandes cisternas que les permiten sobrellevar la crisis hídrica en la Ciudad de México.
"Polanco tiene muchos edificios con cisterna, entonces el problema puede ser que parezcan menos. Anduvieron las pipas por toda la colonia. Nosotros sí padecemos mucho el problema, en esas zonas hubo quienes regaban el pasto, que es lo que no deberían hacer".
La estructura de las casas aledañas a las zonas residenciales impide que los habitantes almacenen agua. Además, comenta Elsa, el corte de agua en la zona ha sorprendido a los habitantes.
"Nosotros casi no padecemos de agua por aquí. Cuando nos trajeron pipas no teníamos tambos o cubetas para almacenar, que es lo que hace la mayoría de la gente que padece agua. Hay mucha fuga por la tubería, porque no hay mucho mantenimiento. Con este problema, pues empiezas la semana con ropa sucia, con la casa sucia. La delegación nos trajo pipas, pero el problema es que no tienes donde poner el agua, osea sólo podemos guardar como unos 20 o 40 litros".
Para los habitantes de la Miguel Hidalgo, la Benito Juárez y Coyoacán, el problema de la falta de agua es relativamente nuevo. A diferencia de alcaldías como Iztapalapa y la Venustiano Carranza, donde históricamente ha habido escasez, los vecinos de estas zonas no han tenido que recurrir al uso de tinacos e, incluso, ni de pipas.
Cifras del Coneval señalan que en Milpa, Alta, el 1.38% de las viviendas aún no disponen de de agua entubada de la red pública. En Xochimilco el 1.3% de las viviendas se encuentran en esta situación; en Tláhuac el 0.30% y en la Magdalena Contreras el 0.03%. En contrate, ninguna vivienda de la Miguel Hidalgo, Benito Juárez y Coyoacán registra esta carencia.