EXTORSIONES EDOMEX

Así es como presuntos trabajadores de CFE extorsionaban a vecinos de Zona Esmeralda, en Atizapán

Narran colonos de Atizapán de Zaragoza, en el Estado de México, cómo estafadores usan falsos uniformes de CFE para pedirles dinero con el pretexto de hacer operaciones en sus medidores de luz.

Créditos: Especial/Cuartoscuro
Escrito en METRÓPOLI el

Vecinos del municipio de Atizapán de Zaragoza, en el Estado de México, revelan lo fácil que es usar un uniforme con logotipos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y pedir dinero a cambio de supuestas reparaciones en su servicio; modus operandi de extorsión que cada vez crece más en Edomex.

La señora Úrsula es residente del fraccionamiento Chiluca, en Zona Esmeralda, y es muestra de cómo operan los extorsionadores. A su domicilio llegó una persona con uniforme de la CFE, en un vehículo blanco, y le dijo que acudía porque tenían un adeudo de luz y que ya la habían cortado el servicio; sin embargo, cuando le solicitaron dinero para una "reconexión", se dio cuenta que sólo le habían bajado el switch de su medidor.

Aunque el sujeto le dijo que regresaría en dos horas, la mujer volvió a subir el interruptor y buscó su último recibo de pago, el cual tendría listo para cuando regresara el supuesto trabajador de la CFE. Al pasar el tiempo, otro supuesto trabajador de la paraestatal regresó y tomó fotos del medidor, con el argumento de que reconectarían el servicio, por lo que Úrsula le reclamó diciendo que sí tenía servicio, que iba al corriente con sus pagos y que en definitiva no les daría nada de dinero.

Este caso se reportó a la Mesa Directiva de la Asociación de Colonos de Chiluca, terminando sólo como un intento de extorsión, pero otros vecinos no tuvieron la misma suerte. 

El vecino Mario Torres también informó que un tipo, quien se identificó como Marco Mendieta, se contactó con él para decirle que iban a cambiarle el medidor por uno digital, historia que creyó al ver llegar a otras personas con emblemas de la CFE, pues se llevaron su anterior medidor de luz y le colocaron uno digital, pero le pidieron $6,000 pesos por el trabajo.

El colono explicó a La Silla Rota que luego de colocado el medidor digital lo dejaron desconfigurado y desde entonces paga consumos como si fuera el servicio de luz de una empresa, “son recibos demasiado altos, exageradamente altos”.    

No obstante, personas con este mismo modus operandi ya habían sido reportadas en el mismo fraccionamiento; la señora Angélica, por ejemplo, dio a conocer que un hombre, sin identificación alguna, amedrentó a la persona que le ayuda en casa diciendo que les iban a cortar la luz, porque debían más de dos años, lo cual es falso.

“Lo que quería esta persona era entrar a mi casa, no sé con qué intenciones, lo que impedí”, explica.

Otro de los vecinos reportó que, en su caso, pretendían cobrarle 20,000 para no cortarle el servicio, también por supuestos adeudos, pero al no efectuarse la extorsión los hombres vestidos de beige se retiraron: “No encontré mis recibos en esos momentos, pero les dije que acudiría en inmediatamente a reclamar a las oficinas porque he pagado cada recibo que llega”.

Geli Rojas pidió a sus vecinos que por favor manden correos a la Asociación reportando esas situaciones, con el fin de ejercer presión para que sean más cuidadosos con el acceso al fraccionamiento, donde casas cuentan con cámaras de seguridad y han podido captar la imagen de los hombres que entran a nombre de la CFE.

Geli Rojas contó que a su casa también fueron los supuestos trabajadores, pero como están al corriente no pasó a más; no obstante, cree que podrían estar coludidos con alguien de la CFE porque le dieron cifras donde, efectivamente, aparece el historial de su recibo.

"No podemos permitir que burlen la seguridad así de fácil, no cabe duda de que cada día son más creativos para robar”, dice.

Desde hace algunas semanas los vecinos de Chiluca, Prado Largo, Condado de Sayavedra, Valle Escondido y Rancho San Juan, denunciaron a sus representantes de mesa directiva que estaban siendo objeto de intentos de extorsión por supuestos trabajadores de CFE, quienes, portando uniformes de esa paraestatal, les solicitaban diversas cantidades de dinero para evitar cortarles la luz debido a falsos adeudos; las cantidades que solicitan van desde los 6,000 a los 20,000 pesos.

Alerta vecinal en Zona Esmeralda

El 9 de enero de 2024, la asociación de colonos del fraccionamiento de Valle Escondido pidió la intervención de la Policía municipal para que detuvieran y remitieran a tres supuestos trabajadores de la CFE, quienes extorsionaban a los residentes, ellos pedían dinero para “arreglar” supuestas desviaciones en la instalación eléctrica por la existencia de “diablitos”.

Los supuestos trabajadores vestían uniformes de la CFE, pero los mimos vecinos denunciantes corroboraron con la dependencia que no eran trabajadores de esa paraestatal.

Los hombres fueron trasladados por policías municipales al Ministerio Público, como lo corroboró el director Fabián Ricardo Gómez Calcáneo, quien entonces pidió a los vecinos que hayan sido víctimas de estas personas que acudieran a ampliar la denuncia por extorsión.

Otros vecinos informaron que a los detenidos se les vio cambiándose de ropa y poniéndose el uniforme de la CFE a la altura de La Comer, en una camioneta blanca a la que le ponían los logotipos de la paraestatal, junto al sitio de taxis.

Según los testimonios recabados por La Silla Rota, esas personas intentaron sobornar al personal de seguridad del fraccionamiento, por lo que se efectuó una estrategia con la policía municipal para detenerlos.

Los sujetos no traían identificación alguna que los acreditara como empleados de la CFE y, quienes portaban credencial de elector, tienen domicilio en la colonia Morelos del vecino municipio Nicolás Romero.

 

En febrero de 2023, en el paraje de Los Pilares, en la carretera Tlalnepantla-Villa del Carbón, fueron detenidos cinco personas que portaban uniformes de la CFE y se transportaban en una camioneta blanca tipo Tornado con los logotipos de la paraestatal, los hombres formaban parte de una célula delictiva que extorsionaban a vecinos de Atizapán de Zaragoza, Nicolás Romero y Villa del Carbón, según informes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.