Xicotepec es un municipio enclavado en la Sierra Norte de Puebla, a más de tres horas de la capital del estado, que el 10 de octubre vivió una jornada sin precedentes que incluyó explosiones, inundaciones, rescates y hasta un tigre que hasta el momento sigue libre. Ríos desbordados, casas bajo el agua y personas sobre las azoteas pidiendo auxilio fueron parte de las imágenes que narran lo sufrido por esa región el día de ayer.
La jornada inició en la madrugada, poco después de las dos, cuando un ducto de Petróleos Mexicanos explotó provocando un incendio que era visible a varios kilómetros de distancia.
Al amanecer, las redes sociales mostraban la imagen del incendio que iluminaba la noche, acompañado por una densa columna de humo que se elevaba cientos de metros.
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Según los reportes preliminares, las fuertes lluvias provocadas por la tormenta tropical Raymond y el huracán Jerry, dos de los fenómenos meteorológicos que azotaron a México casi al unísono, provocaron un deslave de piedras y lodo que quebró un ducto subterráneo y provocó una explosión que era visible desde el vecino estado de Veracruz.
Al sitio acudieron elementos de las fuerzas castrense y de Protección Civil, tanto de Xicotepec como de Poza Rica para mitigar el fuego y evacuar las comunidades cercanas.
Llegar al sitio era de por sí complicado porque la lluvia y los deslaves habían incomunicado la zona. El túnel Necaxa, en la autopista México-Tuxpan, estaba lleno de agua y lodo como muchos caminos de la región. Las autoridades pidieron a los pobladores de la junta auxiliar Villa Ávila Camacho, mejor conocida como “La Ceiba”, que se resguardaran en sus hogares.
Salvan a una bebé
Pero la tormenta no sólo inundó carreteras, también dejó bajo el agua buena parte del Hospital Rural IMSS La Ceiba. Casi un metro de altura alcanzó el agua en los consultorios donde la ausencia de energía eléctrica puso en peligro la vida de varios pacientes, entre los que se encontraban recién nacidos.
”No hay señal y no tenemos cómo comunicarnos”, decía una enfermera mientras su compañero daba ventilación de forma manual a una bebé que padece el síndrome de Guillain-Barré.
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La ayuda llegó desde el aire y en un helicóptero equipado, la pequeña fue trasladada al Hospital Integral de Xicotepec de Juárez, la cabecera municipal, donde los médicos pudieron estabilizarla y salvar su vida.
Pero no todos pudieron salvarse. En otra zona del municipio, cuatro casas fueron sepultadas por el derrumbe de un cerro; en una de ellas habitaba la señora Alicia Ortega quien desapareció después del deslave. Sólo quedó en pie una figura de San Miguel Arcángel como único testigo.
Cerca, una familia de diez personas se refugió en el techo de su casa tras el desbordamiento del río. Durante más de diez horas pidieron ayuda y sus gritos se amplificaron en los videos publicados una y otra vez en redes sociales.
Un tigre suelto
Las sorpresas no daban tregua y por la tarde, el alcalde de Xicotepec, Carlos Barragán Amador, publicó un video donde alertaba a los pobladores porque un tigre había huido del zoológico Animalia, propiedad del edil, cuando la fuerza del agua rompió la jaula que lo resguardaba.
”Lo que ha pasado hoy en Xicotepec no lo habíamos vivido nunca en la historia”, dijo para abrir su mensaje. “También les quiero comentar algo que me tiene muy preocupado… Un tigre anda libre”, expresó preocupado.
Este sábado, el tigre de Bengala del Parque Animalia, fue encontrado.
El pronóstico meteorológico indica que el fin de semana bajará la intensidad de las lluvias en la zona, mientras continúan los trabajos de rescate, se reabren caminos y se reactiva la energía eléctrica en una Sierra Norte poblana que sufrió sus lluvias más fuertes en un cuarto de siglo.
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gph