Luego de que se diera a conocer que el exgobernador de Puebla, Mario Marín, quien enfrenta un proceso penal por tortura contra la periodista Lydia Cacho, logró cambiar su medida preventiva para salir del penal del "Altiplano" y continuar su proceso en libertad, surgieron rumores sobre su posible liberación.
Sin embargo, aunque se notificó que Mario Marín debería continuar su proceso en arraigo domiciliario por mandato judicial, el "El góber precioso" sigue recluido en el Centro Federal de Readaptación Social número 1 “Altiplano”, en el municipio de Almoloya de Juárez, Estado de México.
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Lo anterior se debe a que las autoridades penitenciarias solicitaron una verificación para asegurar que no existan otras investigaciones o procesos penales pendientes en su contra, de acuerdo con fuentes de seguridad.
Por su parte, la Guardia Nacional, informó que no ha recibido indicaciones para llevar a cabo el traslado de Marín Torres a Puebla, donde se ubica su residencia y debería de continuar su proceso con un brazalete.
¿Qué medidas cautelares le impusieron a Mario Marín?
Según la tarjeta informativa sobre el cambio de medida cautelar en la causa penal 26/2028, exgobernador de Puebla promovió una demanda de amparo en 2023, cuestionando la decisión de mantener su medida cautelar de prisión preventiva.
El amparo fue concedido, ordenando a la jueza revisar nuevamente la necesidad de la medida, dado que ya habían transcurrido los dos años máximos establecidos por la Constitución.
"Desahogado el juicio, se dictó sentencia en la que se concedió el amparo y se ordenó que la juez de la causa debía emitir una nueva resolución en la que analizará la subsistencia de la medida de prisión preventiva que se le había impuesto, al ya haber transcurrido el plazo de dos años que como máximo prevé la Constitución y precisó que como se trataba de una medida restrictiva de la libertad, la Ley de Amparo dispone que su cumplimiento debe ser inmediato; cabe precisar que en contra de esta sentencia procede el recurso de revisión", se lee en el documento.
Tras esta revisión, la jueza concluyó que las pruebas aprobadas no justificaban la continuación de la prisión preventiva.
"Esta decisión no implica la libertad del procesado"
De acuerdo con el documento, "esta decisión no implica la libertad del procesado; únicamente la sustitución de la prisión preventiva por otras cinco medidas cautelares que incluso corresponden a las solicitadas por la Fiscalía General de la República en el desahogo de la audiencia".
Estas medidas con las que la jueza consideró se garantizaba que Mario Marín enfrentaría su proceso penal son:
- Uso de brazalete electrónico.
- Resguardo domiciliario con vigilancia permanente de la Unidad de Supervisión de Medidas Cautelares y Suspensión Condicional del Proceso.
- Prohibición de salir de Puebla y del país.
- Exhibición de garantía económica por 100,000 pesos.
- Prohibición de acercarse a la víctima.
"Finalmente, se aclara que la inmediata emisión de esta resolución obedeció a los plazos que señala la Ley de Amparo, por lo que la audiencia en la que se decretó el cambio de medida se realizó el sábado 10 de agosto, en presencia de las partes, incluida la Fiscalía General de la República, por lo que, en términos del artículo 63 del Código Nacional de Procedimientos Penales desde ese momento se le tuvo por notificado del cambio de medidas cautelares".
El caso de tortura a Lydia Cacho
En el 2005, Lydia Cacho fue detenida en Cancún poco tiempo después de que Kamel Nacif la denunció por difamación y calumnia, taras acusarlo de organizar fiestas junto con Succar Kuri, donde funcionarios y empresarios abusaban sexualmente de menores de edad.
La periodista fue trasladada por tierra a Puebla, donde Marín llevaba 10 meses como gobernador, trayecto durante el cual Cacho denunció haber sido torturada por los agentes, quienes la amenazaron con violarla y asesinarla. Aunque fue liberada tras pagar una fianza, el proceso legal en su contra se prolongó más de un año.
En el 2006, la periodista presentó una denuncia contra Mario Marín por soborno, tráfico de influencias y abuso de autoridad, después de que se filtró un audio de una llamada entre el exgobernador de Puebla y Kamel Nacif, conocido como "El Rey de la Mezclilla", en el que Nacif agradecía a Marín por arrestar a la periodista y darle un "coscorrón."
En el audio, Nacif y Marín se refieren a la periodista con adjetivos misóginos, y el empresario llega a llamar al exgobernador “mi héroe” y “mi góber precioso”, apodo por el cual Marín es conocido desde entonces.
En febrero del 2021, la Fiscalía General de la República (FGR) arrestó a Mario Marín en Acapulco, Guerrero, como resultado de un cateo vinculado a una orden de aprehensión emitida desde el 2019. La orden se derivó de su presunta responsabilidad en el delito de tortura contra Lydia Cacho, un crimen grave que le impedía llevar su proceso en libertad.