A tres meses de llegar a su nueva casa, en el parque de conservación animal Africam Safari, en el estado de Puebla, la adaptación de la jirafa Benito ha trascendido los límites del parque y ha quedado inmortalizada por los artesanos de la entidad en las tradicionales artesanías de talavera.
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Benito, proveniente del norte del país, donde padeció maltrato por más de un año de sus dueños anteriores, el Parque Central de Ciudad Juárez, Chihuahua; se ha convertido en más que un animal a visitar en Africam Safari, ya es todo un ícono de la ciudad.
Eso motivó a los artesanos de talavera a inmortalizar a Benito en esta tradicional forma de cerámica con denominación de origen en la ciudad de Puebla, quienes consideran que plasmar a esta jirafa fue una de las experiencias más gratas de su labor.
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"Tenemos 26 años de experiencia y hemos hecho de diferentes imágenes en la talavera y hacer esta figura, que ya viene a ser emblemática de Puebla, en estos momentos fue muy grato y muy emocionante y hemos tenido una buena respuesta por parte del público”, declaró José Antonio López, artesano poblano.
“Plasmar a Benito en Talavera ha sido algo muy importante, hemos tenido visitas de adultos que quedan encantados con ver a Benito en un plato o en cualquier producto que sea de talavera debido a que la artesana Gabriela Rodríguez hizo un trabajo muy bonito", comentó Jessica Varela, administradora de la fábrica de talavera Grupo Armando.
Artesanías de Benito con denominación de origen
La administradora de la fábrica de talavera Grupo Armando, comerciantes de estas artesanías con la imagen de la jirafa Benito informó que ya desde el año pasado, cuando salió a la luz el caso de Benito, tuvieron la idea de inmortalizarlo en talavera, pero cuando se anunció que sería trasladado a Puebla, no lo dudaron y de inmediato comenzaron la producción.
Detalló que los productos que ofrecen conservan la denominación de origen que todo producto de talavera posee, puesto que respetan las normas de la denominación de origen de la talavera poblana.
Debido a ello, solo se ofrecen productos en los seis colores permitidos, pero se puede elegir entre más de 20 diseños, los cuales están hechos completamente a mano para respetar los lineamientos de la denominación de origen. Cada uno de los productos que ofrecen van acompañados con su sello original.
Las artesanías de talavera de la jirafa Benito se venden en precios que van desde los 3,000 pesos (176.8 dólares) hasta los 7,000 pesos (412.7 dólares). Los precios se justifican por la complejidad y tiempo de elaboración que requiere cada pieza.
Entre los diseños que ofrecen puede verse a Benito con gafas, enamorado, mascando chicle o goma, con una rosa en la boca, o bailando.
El pasado de Benito
Antes de su llegada a Puebla, el 23 de enero de este año, la jirafa Benito se encontraba confinada en pésimas condiciones en el Parque Central de Ciudad Juárez, Chihuahua, bajo administración del Gobierno del estado.
Benito vivía en un terreno carente de las condiciones adecuadas para su supervivencia, en donde además, debía soportar temperaturas de hasta 10 grados bajo cero. Fue rescatado de ahí gracias a una campaña nacional de ambientalistas, quienes presionaron al Gobierno para intervenir y trasladarlo a un lugar seguro.
Por ello, con las obras de talavera, los artesanos buscan fomentar entre los ciudadanos el respeto por los animales y enseñar a los niños el respeto por ser un ser vivo.
(Con información de EFE)
VGB