TUXTLA GUTIÉRREZ. - Desde la tarde de este lunes hasta más de la medianoche de hoy martes se vivió otra escena de violencia entre militares y elementos de la Guardia Nacional contra habitantes de la región Sierra de Chiapas. De acuerdo con la información recabada, los soldados del 101 Batallón de Infantería trataron de penetrar, en principio, al municipio de La Grandeza y más noche a El Porvenir.
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La intención de las autoridades, según cuentan fuentes cercanas, era controlar a integrantes del crimen organizado que operan desde hace tiempo y han provocado muertes, cobro de piso y desapariciones, sin embargo, los lugareños advirtieron que, para ellos, la intención de los soldados es "darles paso a miembros de un cártel de la droga", el Jalisco Nueva Generación, a través de su organización "Maíz".
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Para detener el avance de las fuerzas armadas, los pobladores utilizaron piedras, palos, machetes y lo que hallaban para defenderse. Mientras que los soldados respondían con gas lacrimógeno. De hecho, en uno de los tantos videos que circulan en redes sociales, se escuchan disparos con arma de fuego de grueso calibre, al momento de que la sociedad se replegaba.
Aunque aún no se ha confirmado si hubo muertos y lesionados, la refriega entre militares y población civil ha dejado automóviles y viviendas afectadas, entre otros. En uno de los materiales audiovisuales, se observa el piso con sangre; al parecer entraron a un hotel.
Ante este incierto panorama, cientos de personas de ambas localidades serranas huyeron hacia las montañas y otros al municipio de Chicomuselo, donde la semana pasada se protagonizó un episodio similar. A pesar de que esa vez no se confirmó, se habló del deceso de dos varones.
"Estamos en Chicomuselo un grupo de personas que fuimos desalojadas, porque nos piden dar una cuota con el grupo de Sinaloa (en referencia al Cártel)", manifestó una señora, quien dijo que con ella escapó su padre, mismo que fue golpeado y además padece una enfermedad crónico-degenerativa.
A pesar de que decenas de personas escaparon de la violencia, advirtió que no todos corrieron con la misma suerte, pues no les dio tiempo de huir. Advirtió que, incluso, quienes efectuaron el desalojo supuestamente no pertenecían al Ejército mexicano ni a la GN.
"Hemos perdido todo, nuestros animalitos... ¡Por favor, ayúdennos! Estamos en Chicomuselo, ahorita está tranquilo, pero hay muchas familias atrapadas aún", insiste la mujer envuelta en un chal rosa. Pese a que se viven momentos de tensión, ninguna autoridad del estado informa sobre lo acontecido en esa zona, o lo que haría para contener a los cárteles. La tensión se eleva, pues otra madre de familia ruega que le liberen a dos de sus hijos que, según ella, fueron copados por el CDS. "Son 80 mil pesos que nos piden por dejarlos libres, pero no lo tenemos".