La Navidad y los festejos de fin de año traen consigo diversos eventos de índole social, los cuales representan distintos desembolsos de diferentes tipos, como la compra de productos alimenticios, la adquisición de cosas útiles para la vida diaria, algunos gustos personales o la entrega de regalos.
Una costumbre que ya se ha vuelto tradicional en diversos ámbitos son los intercambios de regalos, que ya sean temáticos, por sorteo y de muchos otros tipos, representan una búsqueda, por parte de los consumidores mexicanos para llenar las expectativas de las personas por partida doble, es decir, quien compra el regalo y quien lo recibe.
En las oficinas y diferentes espacios de trabajo, en las cenas y comidas navideñas, reuniones familiares y diversos eventos más, el intercambio de regalos hace que las personas dediquen parte de su tiempo y su presupuesto para la compra de presentes.
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De acuerdo con datos proporcionados por Statista, durante la presente temporada navideña, los mexicanos buscan los siguientes productos para regalar en las diversas alternativas de compra que existen, tanto en tiendas físicas, como espacios de comercio electrónico.
- Ropa, textiles y calzado 62%
- Cosméticos, perfumes y cuidado personal 39%
- Juegos de mesa, juguetes, muñecos 32%
- Smartphones, tabletas y accesorios 25%
- Dinero (efectivo o transferencias) 25%
- Joyería y relojes 24%
- Vales, tarjetas de regalo 16%
- Comida, bebidas 15%
5 consejos para hacer de tu intercambio de regalos una gran experiencia
Para que el intercambio de regalos se convierta en una verdadera experiencia de integración social y realizar esta actividad de la mejor manera, los siguientes consejos pueden ser de gran utilidad.
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- Establezcan reglas. Para que que esta actividad sea realmente una experiencia grata, lo mejor es delimitar las reglas desde antes de su realización, con ello se puede garantizar equidad y la posibilidad que todos se diviertan.
- No obligar a nadie a entrar. Los intercambios de regalos deberían ser una experiencia de convivencia genuina, por lo que obligar a las personas a formar parte de ellos puede generar conflictos. A veces, no todos están en posibilidades de desembolsar para hacer obsequios y esto también hay que comprenderlo.
- Pongan un tope de precio. Para que los intercambios de regalos tengan verdadera reciprocidad, lo justo es que tengan el mismo precio, por lo que acordar un precio puede resultar atractivo para que todos quieran participar en este tipo de convivencia.
- Organiza una lista de regalos. Si bien, acordar regalos puede afectar al factor sorpresa, hacer una lista de regalos puede garantizar la satisfacción de todos los participantes. Se puede pedir a cada integrante que anote una lista de dos o tres presentes que desea.
- Promueve temáticas alternativas. Aunque se trata meramente de un acto de consumo, un intercambio de regalos puede resultar menos costoso si se le agrega un toque de creatividad. Por ejemplo, algunas personas optan por hacer presentes hechos por sus manos o prefieren regalar productos sólo simbólicos, que no representan un desembolso importante.