BARCELONA.- La Fiscalía procedió legamente en contra del equipo de futbol FC Barcelona y en contra de sus expresidentes Josep Maria Bartomeu y Sandro Rosell, al denunciarlos por presuntos pagos millonarios al exdirigente arbitral José María Enríquez Negreira con el objetivo de obtener favores de árbitros en los partidos en los que jugara.
La Fiscalía de Barcelona pidió que el actual presidente del Barça, Joan Laporta, sea citado como testigo en este nuevo escándalo que le estalla al club blaugrana.
La denuncia por los delitos de corrupción entre particulares, administración desleal y falsedad documental, fue interpuesta ante el juzgado de instrucción número 1 de Barcelona, para que sea sumada al caso que presentó el árbitro del VAR Estrada Fernández contra Negreira.
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La Fiscalía de Barcelona ha realizado una investigación por cerca de un año sobre los presuntos pagos a Negreira, que a través de dos empresas ha recibido casi siete millones de euros del Barça por supuesto asesoramiento verbal al club.
La denuncia se dirige también contra el exdirector ejecutivo del club Oscar Grau y el exdirector de deportes profesionales Albert Soler, que eran "de la máxima confianza" de Bartomeu, según el ministerio público.
El escándalo de corrupción del Barcelona
La Fiscalía sostiene que, a través de los presidentes Rosell y Bartomeu, el club azulgrana "alcanzó y mantuvo" un "acuerdo verbal estrictamente confidencial" con el entonces vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) José María Enríquez Negreira para que, "a cambio de dinero", realizase "actuaciones tendentes a favorecer al FC Barcelona en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase" y en los "resultados de las competiciones".
A tal efecto, según la Fiscalía, las sociedades de Negreira -N SCP y D 95 S.L- giraron entre enero de 2011 y junio de 2018 facturas que fueron presentadas al cobro ante el FC Barcelona "sin que las mismas respondieran a ninguna prestación o servicios de asesoramiento técnico real".
La Fiscalía subraya que el CTA, del que Negreira era vicepresidente, se encargaba de designar a los árbitros para cada partido de las competiciones españoles oficiales y que además el denunciado participaba en el proceso de evaluación para los ascensos y descensos de categoría de los árbitros, así como de proponer los candidatos para ser colegiados internacionales.
Según la Fiscalía, los pagos realizados por el FC Barcelona a Negreira entre el 2001 y el año 2018, durante su vicepresidencia en el CTA, superaron los 7.3 millones de euros, lo que supuso una "auténtica remuneración" no prevista en los estatutos del club ni aprobada por la asamblea general, de forma que estas percepciones no tuvieron "soporte legal ni estatutario alguno".
(Con información de EFE)