La Lagunilla, ubicada al norte del Centro Histórico de la Ciudad de México, tiene raíces que se remontan a la época prehispánica, cuando era parte del sistema lacustre que rodeaba Tenochtitlán. Su nombre proviene de las pequeñas lagunas formadas tras el desecamiento de los lagos, transformándose con el tiempo en zona urbana y comercial.
Durante el porfiriato, La Lagunilla se consolidó como un importante centro de comercio popular. En el siglo XX se hizo famosa por su tianguis, especializado en antigüedades, ropa, muebles y artículos de colección. Hoy representa un vibrante espacio cultural donde convergen historia, tradición y la vida cotidiana de la capital.
Dentro de sus calles se encuentra una pulquería oculta, que por más de 100 años se ha convertido en un punto de referencia dentro de la zona y una parada obligatoria para los amantes de esta bebida originaria de la época prehispánica. Aquí están los detalles.
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¿Cuál es la historia detrás de la pulquería más antigua de La Lagunilla?
Contexto: se trata de la pulquería La Antigua Roma, un establecimiento ubicado en República de Perú 38, en el barrio de La Lagunilla. Fue fundada alrededor de 1907, siendo un testigo de los eventos históricos que sucedieron en la capital mexicana, conservando elementos arquitectónicos y decorativos que evocan épocas pasadas.
Uno de sus principales atractivos fue el antiguo "Departamento de Damas", una sección separada que en su tiempo permitía a las mujeres consumir pulque de forma discreta debido a las restricciones sociales de la época. A pesar de esto, la pulquería es reconocida a nivel nacional por sus bebidas prehispánicas.
El ambiente en La Antigua Roma es una mezcla de nostalgia y autenticidad. Al entrar, los visitantes son recibidos por una rockola que reproduce melodías de artistas como José Alfredo Jiménez y la Sonora Santanera, mientras disfrutan de pulque natural o curados traídos desde Tlaxcala, acompañados de botanas tradicionales como chicharrones y palomitas.
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La importancia de esta pulquería en el barrio de La Lagunilla
A lo largo de los años, La Antigua Roma ha sido un punto de encuentro para diversas generaciones. Figuras destacadas del boxeo y la lucha libre, como "Kid Azteca" y "El Negro Casas", han sido asiduos visitantes, compartiendo espacio con jóvenes y adultos que buscan una experiencia auténtica en el corazón del Centro Histórico.
La Antigua Roma no solo es un lugar para degustar pulque, sino también un espacio que preserva la memoria cultural de la ciudad. Su resistencia a desaparecer en un entorno urbano en constante cambio la convierte en un símbolo de la identidad chilanga.
El actual propietario, Jorge López, representa la cuarta generación al frente del negocio. Su compromiso con la tradición y la calidad del pulque ha sido fundamental para mantener viva la pulquería, atrayendo tanto a clientes habituales como a nuevos visitantes interesados en la cultura popular mexicana.
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Visitar La Antigua Roma es sumergirse en una experiencia que combina historia, sabor y comunidad. Es un testimonio viviente de la rica herencia del pulque en México y un recordatorio de la importancia de preservar nuestras tradiciones.
