Durante la vibrante década de los ochenta, el grupo español musical Locomía se consolidó como un fenómeno cultural y estético, marcando tanto la escena europea como la mexicana con sus enormes abanicos, vestuarios extravagantes y una energía única en las pistas de baile.
Bajo ese contexto, un exintegrante de Locomía se ha enfrentado a una difícil situación: una infancia marcada por la desintegración de su familia y una vida llena de excesos, provocando que para poder sobrevivir, tuviera que bailar y cantar en el metro de Madrid y ahora, en las calles de Morelia en Michoacán.
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¿Quién es el exintegrante de Locomía captado bailando y cantando en Morelia?
Se trata de Luis Font, hermano de Javier Font, quien se unió a la vibrante agrupación a los 16 años y que había pasado por una infancia difícil. Su compleja relación con su hermano, el éxito de Locomía y las largas horas de trabajo provocaron que poco a poco su vida se fuera al abismo. Al dejar el grupo de 1997, cayó en una profunda depresión.
Poco a poco su declive iba sucediendo: sin familia, sin trabajo y marcado por las adicciones, ocasionaron que tuviera que vivir en las calles de Madrid. Durante más de un año y medio, Luis Font sobrevivió a base de las monedas que la gente le daba cantando en el metro y refugiándose en un parque.
Fue justamente en ese momento oscuro cuando vio una luz de esperanza: una familia mexicana, viviendo en Morelia, lo acogió. Le ofrecieron techo, comida y, sobre todo, afecto. Gracias a ellos, encontró el espacio para empezar a recomponerse y recuperar su vida.
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En una entrevista para “Ventaneando”, Luis Font rompió el silencio y compartió su odisea personal, su caída y el proceso de reconstrucción. Hoy vive en Morelia, entre coreografías improvisadas y rutinas cotidianas llenas de esfuerzo y esperanza. Comenta con optimismo: “Me he vuelto a reconstruir… me siento mejor que nunca”.
EONM
