Las pistas de la segunda habitante de La Casa de los Famosos México se confirmaron: será la actriz Olivia Collins la que acompañe a Facundo como los primeros que entraran al reality show de Televisa.
Collins fue una figura de la televisión y el cine mexicano en la década de los 80 y 90. En cuanto a los melodramas, interpreta casi siempre la villana que arrebata amores y dinero, mientras que en el séptimo arte es la mujer sexy, pero fatal que provoca la perdición de los protagonistas, que son casi siempre interpretados por cómicos poco guapos.
El descubrimiento de que ella es la segunda habitante de La Casa de los Famosos México en su tercera edición se filtró desde antes del anuncio oficial, ya que la página oficial del reality publicó un video de los pies de esta concursante a manera de trivia. Y esos pies traen puestos unos coquetos zapatos de tacón que son los mismos que Olivia suele usar en eventos públicos: traen una mariposa en el empeine.
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Olivia Collins tuvo una historia terrible por su matrimonio con Silvio García Pato, uno de los publicistas más exitosos en los años 70 y 80, no sólo en México, ya que también tenía oficinas en Japón y Estados Unidos.
La agencia de García Pato es la creadora, por ejemplo, de la frase con la que el gansito Marinela pasó a la historia "Recuérdame".
Collins acababa de salir de una relación cuando conoció a García Pato y la conquistó con detalles y regalos. Para ese tiempo, Olivia ya era una actriz exitosa que estaba constantemente de viaje, pero cada que regresaba a su casa, le esperaba un regalo. Fue así como García Pato la conquistó y convenció de casarse con él, sin suponer que eso significaría 25 años de infierno emocional y físico.
García Pato comenzó ejerció violencia sicológica, física y sexual contra Olivia Collins, quien a pesar de que intentó divorciarse en varias ocasiones, nunca pudo concretar el trámite ya que; acusa, su marido usaba su poder económico.
"Compraba a todos los abogados. Simplemente no pude contra todo su poder y dinero", dijo en una entrevista con Gustavo Adolfo Infante.
¿Por qué abandonó Olivia Collins a sus hijas?
Una forma de tratar de escapar a ese infierno fue que decidió irse a vivir a España, aunque todavía casada con García Pato. Ahí vivió un momento dramático cuando estuvo a punto de arrojarse desde el balcón de la casa donde vivía.
Para ese momento, su vida con el publicista era ya un infierno.
"Yo acepté volver con el per con una condición: que nunca me volviera a tocar... y así fue. Nunca permití que volviera a tocarme... pero hubo violaciones".
Estando en España, la única forma de sobrevivir y deshacerse del lastre que significaba su matrimonio fue dejar a sus hijas, perder su casa, salir huyendo para regresar a México a buscar trabajo.
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Sus hijas, de hecho, se quedaron en Europa, estudiaron una carrera y son hoy profesionistas exitosas y, explica Oliva, entienden perfectamente las razones por las que tuvo que abandonarlas durante un tiempo.
JQ
