“El señor Paco Stanley les debía una fuerte cantidad de dinero a los hermanos Amezcua al parecer por drogas”. Esta declaración está contenida en la declaración ministerial que rindió Luis Gabriel Valencia el 7 de agosto de 1999, dos meses después del asesinato de Paco Stanley.
Este hombre se presentó como supuesto cocinero de los hermanos Luis y Jesús Amezcua, encarcelados en el reclusorio sur con sentencia de 49 años por narcotráfico. Luis Gabriel Valencia aseguró a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal que, al ser el cocinero de los Amezcua, se había enterado de cómo planearon el asesinato de Stanley.
La investigación del caso Stanley se registró en 50 tomos, pero es en el tomo 38 donde está la declaración del supuesto cocinero que en dos días distintos dio su versión de lo que sucedió dentro del reclusorio y que fue el testimonio con el que se acusó a Mario Bezares y Paola Durante de haber planeado el asesinato de Paco. Estuvieron presos dos años, pero salieron libres al comprobarse la falsedad de muchas de las declaraciones de Valencia.
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De acuerdo con el expediente, Mario y Paola visitaron a los Amezcua junto con otro hombre al que apodaban el Cholo, “tatuado de su cuerpo, de 1.80 metros de altura aproximadamente, que se rasura la cabeza, de bigote amplio y barba de candado, corpulento, ya que hace ejercicio y que vive por la colonia San Felipe de Jesús”.
Luis Gabriel Valencia asegura que “El Cholo visitó a los Amezcua solo en una ocasión, que en esa ocasión Jesús le dio mil pesos”.
Una investigación posterior de la Comisión Nacional de Derechos Humanos reveló, primero, que Luis Gabriel Valencia nunca había sido el cocinero de los Amezcua. El director general de Prevención y Readaptación Social del Distrito Federal informó:
“De acuerdo con el artículo 65 del Reglamento de Reclusorios y Centros de Readaptación Social del Distrito Federal ningún interno puede ser comisionado para prestar servicios personales en favor de otro interno. Por ello, Luis Gabriel Valencia López no pudo haber sido comisionado como cocinero de los hermanos José de Jesús y Luis Ignacio Amezcua Contreras”.
¿Paco Stanley tenía relación con el narcotráfico?
La sospecha de que Paco Stanley tenía relación con el crimen organizado circula casi desde el día de su asesinato. Benito Castro, su amigo y colaborador asegura que eran adictos a la cocaína y que en una ocasión lo vio reunirse con alguien a quien llamaban “el Señor”, y que supuestamente se trataba Amado Carrillo Fuentes, “El señor de los cielos”.
Pepe Cabello, productor de Stanley durante gran parte de su carrera confirmó una reunión de Paco con el narcotraficante, aunque dice que desconoce de qué trato esa reunión.
El expediente, sin embargo, se centra en mostrar la supuesta relación entre Stanley y los Amezcua a partir del relato de Luis Gabriel Valencia. La Comisión Nacional de Derechos Humanos, sin embargo, demostró que se trataba de un testimonio poco confiable.
“De los 170 medios de prueba que el Ministerio Público invocó en el ejercicio de la acción penal, el único que inculpa directamente a Paola en los hechos delictuosos motivo del proceso es el testimonio de Luis Gabriel Valencia López. Pero hay tres factores que lo invalidan: a) Hay indicios de que las declaraciones fueron inducidas o impuestas a Luis Gabriel Valencia López; b) De acuerdo con los estudios que le fueron practicados, el testigo presenta características psicológicas que no lo hacen digno de fe, y c) Sus declaraciones contienen incongruencias y están contradichas por una cantidad abrumadora de evidencias”.
Al final, la pregunta de “¿Quién mató a paco Stanley?” quedó sin respuesta.