RANCHO PEPE AGUILAR

Así es el interior del impresionante rancho El Soyate de la Dinastía Aguilar

Lo construyó don Antonio Aguilar como símbolo del gran amor que le tenía a su amada esposa, Flor Silvestre.

Así es el rancho 'El Soyate', propiedad de la Dinastía Aguilar.
Dinastía Aguilar.Así es el rancho 'El Soyate', propiedad de la Dinastía Aguilar. Créditos: LSR / pepeaguilar_oficial.
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'El Soyate' es el refugio de la Dinastía Aguilar, donde los lazos familiares de sus nuevas generaciones se fortalecen y siguen perdurando con el paso del tiempo.

La Dinastía Aguilar es una de las más reconocidas en el medio artístico de nuestro país, cuyo legado de Antonio Aguilar y Flor Silvestre sigue perdurando con el paso de los años gracias a sus hijos y nietos.

 

El impresionante rancho 'El Soyate' de la Dinastía Aguilar está en el corazón de Zacatecas, entre las tierras del poblado de Tayahua, en el municipio de Villanueva. 

La propiedad perteneció al patriarca de la familia Aguilar, don Antonio Aguilar, 'El Charro de México', y decidió bautizarlo como 'El Soyate'.

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Pepe Aguilar y Antonio Aguilar Jr. son los legítimos herederos de este refugio de la Dinastía Aguilar, que contempla miles de hectáreas, como afirmó Marcela Rubiales, hija de Flor Silvestre.

José Pascual Antonio Aguilar Barraza, mejor conocido como Antonio Aguilar, diseñó y construyó este rancho en honor al gran amor de su vida: doña Flor Silvestre; "cada ladrillo de la construcción era una canción que le dedicaba".  

A través de redes sociales, Ángela, Leonardo y Majo, hijos de Pepe Aguilar y Antonio Aguilar Jr., han compartido pequeños detalles que muestran 'El Soyate', donde puede apreciarse que la arquitectura del rancho tiene figuras tradicionales de México, largos pasillos, fuentes, un establo, una enorme cocina, varios patios y caballerizas. 

La decoración tiene muchos recuerdos de Antonio Aguilar y Flor Silvestre como fotos y cuadros; ahí pasaron los últimos años de su vida.

Hay una capilla en lo alto del Cerro San Cayetano, ubicada dentro del rancho 'El Soyate', donde reposan los restos mortales de Guillermina Jiménez Chabolla, mejor conocida como Flor Silvestre, junto a su amado esposo, don Antonio Aguilar. En ambas tumbas, se encuentran característicos sombreros y sillas de montar que usaron los famosos cantantes.

 


Antonio Aguilar murió a los 88 años de edad el 19 de junio de 2007 a consecuencia de una neumonía que aunque fue controlada le afectó su funcionamiento renal y pulmonar. 13 años después, Flor Silvestre perdió la vida a los 90 años de edad el 25 de noviembre de 2020 por problemas de salud derivados de un cuadro de tifoidea. 

 

 

 

 

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