VERACRUZ, VER. - “Hola, buenas tardes, hoy voy a tener un en vivo de puros uniformes”, dice Teresa Vergara desde una transmisión en su Facebook, al fondo se alcanza a ver un montón de ropa colgada en ganchos. La comerciante y madre de familia inició las vacaciones de verano con la venta de uniformes escolares de uso, con lo que ganó pagó la colegiatura y lista de útiles de sus hijas.
Este 26 de agosto regresarán a clases más de dos millones de estudiantes de diferentes niveles y subsistemas educativos en Veracruz para el ciclo escolar 2024 - 2025, por lo que las familias veracruzanas continúan en búsqueda de la lista de útiles y uniformes al mejor precio.
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Tere, como es conocida por las demás comerciantes y sus clientes, espera a que más personas se conecten a la transmisión para mostrar toda la mercancía de uniformes escolares que tiene almacenada, que guardó casi en todo un año para este regreso a clases.
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Se considera una "Neni", como otras mujeres veracruzanas que ofrecen sus productos a través de redes sociales y con lo que vende dice que busca apoyar el gasto familiar de otras madres, pero también contribuir con dinero en su hogar.
Tiene dos hijas de 8 y 11 años que regresarán a las aulas escolares y sabe lo importante que es ahorrar en esta temporada, por lo que desde hace casi un año almacena los uniformes que le llegan con las pacas de ropa que compra, para después revenderlos a un precio más accesible para las familias.
“Cuando la gente los pide, que veo una publicación en el Facebook y lo tengo, los ofrezco, con un precio más accesible para la gente que estamos necesitadas, como uno. Las vendo baratas en 25 pesos”, agrega.
Los uniformes escolares nuevos, en tiendas del centro de la ciudad de Veracruz, pueden alcanzar hasta 250 pesos una camisa y los completos que incluyen falda, pantalón y demás accesorios entre 800 o rebasar los mil pesos, por lo que las familias de escasos recursos recurren a las tiendas o personas que vende de segunda mano para ahorrar, asegura.
En Facebook es común ver a personas ofrecer los uniformes que a sus hijos ya no les quedan, incluso realizan trueques para cambiar los productos por otros que sean de utilidad para la persona que lo ofrece.
Cada que regresan a clases los alumnos, Tere y otras comerciantes ven una oportunidad para vender y así ayudar a la economía de su hogar y a la de las demás familias. Este verano no fue la exención, ya que dice que tuvo una buena venta.
“Sí he tenido venta de uniformes. A veces me piden las que ya me conocen o las que no me conocen me piden por el Face, si lo tengo se los vendo, yo tengo niñas en la escuela, ahorita la camisita de mi niña no la tenía y me estaba saliendo en 240 (pesos) la pura camisita blanca con un logotipo, como yo tengo camisas de mis ventas, nada más pague 60 pesos por el logo. De 240 a 60 está muy práctico”, afirma.
Desde julio comenzó a ofrecer los uniformes, así como zapatos escolares que le llegan. La ropa la compra en otros municipios como Córdoba, Xalapa o a veces se la regalan. Con la ganancia que obtiene, ayuda a su esposo a mantener a la familia.
En esta ocasión el dinero que ganó lo destinó para comprar los útiles escolares de sus hijas, en promedio dice que se gastó mil 300 pesos por cada una, a parte la colegiatura que costó mil pesos.
“Nos apoyamos, ahorita que vienen las escuelas la colegiatura es de mil pesos. Mi esposo pagó la colegiatura, yo cada ocho días que vengo acá, le compró que las libretas, que los colores y así poco a poco. Ya ahorita gracias a Dios, ya tenemos todo para que las niñas entren a la escuela”.
Todavía tiene algunos uniformes escolares, también zapatos de segunda mano para niña y niño, para rematar esta mercancía el calzado lo da en 80 o 50 pesos, con la finalidad de venderlos más rápido y que no se le queden.
Redes sociales, un impulso para las ventas
La mujer de 48 años, lleva casi una vida dedicada a la venta de ropa y al comercio, por lo que trata de inculcarles a sus hijas el gusto por las ventas. Este trabajo le ha permitido sacar adelante a su familia, además de que la hizo conocida por varias mujeres que se dedican a lo mismo.
Los lugares donde vende son espacios públicos como tianguis y zonas permitidas por el ayuntamiento de Veracruz para que las “Nenis” las ocupen, este es el caso de la banqueta frente al expenal de Ignacio Allende, en la zona centro. En esa antigua cárcel, cada lunes se colocan docenas de mujeres para vender y hacer entregas de sus productos que ofrecen por redes sociales, a partir de la 2:00 de la tarde hasta las 6:00.
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Tere cuenta que la manera de vender evolucionó con el paso de los años, las y los comerciantes por lo regular tenían un lugar establecido donde las personas podía acudir a ver sus productos, después se colocaron en tianguis que ponen cada fin de semana en ciertas colonias o avenidas.
Pero a raíz de la emergencia sanitaria por la pandemia de covid-19, la manera de vender y comprar se trasformó repentinamente, el comerció se convirtió en virtual y las vendedoras también se adaptaron a las nuevas tecnologías.
Este fue el caso de Tere, quien desde hace 4 años ofrece sus productos en redes sociales, principalmente en la plataforma de Facebook, primero ofrecía la ropa en grupos de compra-venta, después su hija la ayudaba a realizar videos en vivo donde mostraba la mercancía que tenía.
“Ahorita con lo del coronavirus no se podía poner en los puntos de entrega y nos quitaron. De hecho, yo venía vendiendo desde el Tranvía, pero nos quitaron y ya se vino lo del coronavirus y empezamos a vender por en vivos en el Face y parece que se dio más la venta, porque ahorita nada más vengo y entrego, hago puras entregas”.
Cuando termina de hacer sus quehaceres en el hogar, Tere realiza sus transmisiones en vivo, ahí encontró una nueva manera de vender y las familias jarochas una para comprar. Ahora con el regreso a clases, aprovechó esta herramienta para alcanzar a más personas y clientes.
MB