XALAPA, VER.- "Arroz con leche, yo quiero encontrar a una compañera que quiera soñar. Que crea en sí misma y salga a luchar, por conquistar sus sueños de más libertad. ¡Valiente sí, sumisa no!”, entonaban con fuerza cuatro menores que, al lado de sus madres, encabezaron el contingente de miles de mujeres que marcharon este miércoles ocho de marzo, en el marco del día Internacional de la Mujer.
En la marcha de este día, la edad no importaba, pues al igual que las cuatro menores, una mujer de pelo entrecano se sumó a la marcha. Ella no caminó por las calles, pero se apostó firme en la acera con su pequeña cartulina con la leyenda: “Por ti, por mí, por todas, 8M”.
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Este miércoles ocho de marzo fueron miles de mujeres que caminaron, cantaron y dieron muestra de organización para exigir un estado más seguro, para frenar el acoso, las desapariciones y la violencia feminicida.
Como ya es una tradición en Xalapa, año con año, el lugar de concentración fue el Teatro del Estado, donde las participantes llegaron con pancartas, megáfonos, ropa de color morado, negro o verde; hubo mujeres con niños en brazo, integrantes de colectivas y universitarias que formaron las largas filas a las que no se les veía fin.
La movilización fue vigilada en todo momento por policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), y drones que seguían minuciosamente la ruta del contingente. Incluso, regresaban cuando las mujeres hacían alto para reagruparse.
Un grupo de feministas separatistas, se adelantaron al resto del contingente, por momentos hacían pintas o lanzaban fuego al juntar la pintura en aerosol y encendedores. A ratos gritaban, “prensa no tome fotos, hay infancias”, “no queremos hombres en la marcha”.
Metros adelante, en la entrada al Viaducto, sobre la avenida Clavijero, se realizó un performance. Tres jóvenes se despojaron de su ropa, mientras otra más exigía: ni una más desaparecida, ni un asesinato más.
Por algunos minutos el contingente de mujeres permaneció al interior del Viaducto, para hacer pintas y colocar carteles de agresores y violadores. Al retomar su camino por la calle Zamora se encontraron con elementos de la SSP y un grupo de católicos que resguardaban la iglesia Casona del Beaterio.
A lo largo de su recorrido, negocios locales ofrecían agua a las participantes. Locatarios de algunos negocios por donde pasó la marcha ofrecieron vasos de agua para refrescar a las mujeres que marchaban. Sin importar que algunos de los "aguadores" fueran hombres, las mujeres aceptaron el agua debido las altas temperaturas de este miércoles.
Al llegar a la Plaza Lerdo, frente al Palacio de Gobierno donde despacha el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, los contingentes no cesaron de gritar: “no somos una, no somos tres, pinche gobierno cuéntanos bien”. Ahí también quemaron cartulinas con nombres de acosadores y violadores.
Al lado de las lonas que se colocaron en la fachada de palacio, difundiendo la inclusión y la participación de las mujeres en puesto de toma de decisiones, una joven realizó un nuevo performance, donde el tema fue el aborto.
"Mujer, hermana, aquí está tu manada”, “Ni una más, ni una asesinada más”, “señor, señora, no sea indiferente, se mata a las mujeres en la cara de la gente”, “No se va a caer, lo vamos a tirar, el Estado opresor es un macho violador”, fueron las consignas que no cesaron en todo el recorrido.
mb